La decisión de cierre de la 'fábrica de botellas' de Jerez está tomada y no hay marcha atrás. Al menos, esta fue la informació difundida ayer por la emisor decana Radio Jerez, de la cadena SER -que citó fuentes cercanas a la compañía-, que llegaron a asegurar que "se han apurado todos los escenarios posibles antes de tomar la decisión de cerrar".

La medida, siempre según esas fuentes, afecta "a 120 empleados de plantilla" y han destacado que la multinacional trabaja para que la extinción de la planta "no sea traumática" para el personal.

Sobre la polémica abierta en torno a la recalificación de los terrenos aprobada por el gobierno local en el PGOU, las mismas fuentes consultadas afirmaron que Vicasa, al no construir la nueva fábrica, "renunciará explícitamente a la recalificación del suelo", como firmó en un convenio suscrito con el Ayuntamiento. Las mismas fuentes señalan que tras la reunión informativa prevista para el próximo lunes, en la que Vicasa dará traslado de la decisión a la alcaldesa Pilar Sánchez, la compañía hará oficial el cierre en un comunicado en el que también se detallará la situación económica que motiva el cese de la actividad. A este encuentro asistirá el director general de Saint-Gobain en España, Ulpiano Gómez.

A consultas de este periódico, Ignacio Benítez, miembro del comité de trabajadores, rechazó los argumentos esgrimidos por la multinacional. "No hay excusas ni razones que avalen la decisión de cerrar. Por otro lado, de momento no han presentado de manera oficial ningún expediente que afecte al empleo. Si es así, estará plagado de falsedades. Quizás puedan hacerlo el lunes tras la reunión con Pilar Sánchez. Nosotros lo rechazaremos". Los trabajadores de la factoría siguen protagonizando asambleas permanentes de manera diaria en los accesos a la fábrica.