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El comprador de Nueva Rumasa declarará en la Audiencia el día 21

El juez Pablo Ruz cita como testigo al empresario valenciano Ángel de Cabo en la causa abierta contra la familia Ruiz-Mateos por estafa en la emisión de pagarés

El empresario valenciano propietario de Nueva Rumasa, Ángel de Cabo.
Redacción / Jerez

29 de octubre 2011 - 01:00

El nuevo propietario de Nueva Rumasa, el empresario valenciano Ángel de Cabo, declarará el próximo 21 d e noviembre en la Audiencia Nacional en calidad de testigo en la causa abierta contra la familia Ruiz-Mateos por presuntos delitos de estafa e insolvencia punible, según la providencia dictada el jueves por el juez Pablo Ruz.

El magistrado considera pertinente llamar a declarar al empresario valenciano, especialista en la compra de compañías en quiebra y último propietario de Marsans, para que explique el proceso de compra de Nueva Rumasa, acordado el pasado 9 de septiembre.

Su declaración ante la Audiencia Nacional será una de las pocas ocasiones en las que se muestre en público el empresario, al que generalmente representan su 'mano derecha' y director general de Nueva Rumasa, Iván Losada Castell, el abogado Fernando Lavernia Sanchiz o José Vicente Semper Belenguer.

La comparecencia de De Cabo fue solicitada por una de las más de 25 acusaciones particulares presentes en la causa. El liquidador de Marsans únicamente ha presentado hasta la fecha acreditación de la compra a la familia Ruiz-Mateos de 19 de las sociedades matrices de Nueva Rumasa a por el valor simbólico de un euro por cada una.

La mayoría de estas sociedades están domiciliadas en paraísos fiscales, entre los que destaca Belice. Tras la adquisición, los compradores remitieron a la Audiencia Nacional el contrato y las escrituras de compra de las sociedades del grupo empresarial, documentación que fue solicitada por las acusaciones y la Fiscalía Anticorrupción.

Según la información facilitada por la familia Ruíz Mateos y De Cabo, la operación de compraventa se cifra en 1.500 millones euros, el valor del pasivo que arrastra Nueva Rumasa y del que se hace cargo el nuevo propietario.

La mayoría de las empresas del grupo Nueva Rumasa también están inmersas en concursos de acreedores, por lo que serán los respectivos jueces los que decidan sobre el pago de las deudas a los acreedores, así como a los inversores en pagarés de las empresas.

Entre las sociedades adquiridas por De Cabo se encuentran Bardajera, que actuaba como caja única del grupo, Ajerezada, Complejo Bodeguero Bellavista, Inversiones Ruiz Mateos y Nueva Rumasa.

La semana pasada, el juez Pablo Ruz tomó declaración al fundador de Nueva Rumasa, José María Ruiz-Mateos, su mujer, Teresa Rivero, a sus seis hijos varones, así como a su sobrino Zoilo Pazos, todos ellos imputados. Los miembros de la familia siguieron al pie de la letra la estrategia legal de señalar al patriarca como único responsable de la gestión de Nueva Rumasa, quien podría evitar el ingreso en prisión por su avanzada edad y estado de salud.

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