La flota de cerco de Barbate está ya amarrada a puerto después de que se haya cerrado oficialmente la campaña del boquerón en el Golfo de Cádiz, al superarse la cuota prevista para este año. Aunque aún se puede pescar otras especies en este caladero, estos barcos consideran que ello no le reportaría beneficios por lo que han decidido amarrar y, ahora sí, acogerse a las ayudas dispuestas por el Gobierno por la suspensión el pasado febrero del acuerdo pesquero con Marruecos. La mayoría de la flota no quiso acogerse a la primera fase de estas ayudas porque preferían faenar.

Este amarre forzoso coincide con la reciente elección de Alfonso Reyes Vera como nuevo patrón mayor de la Cofradía de Pescadres de Barbate. Reyes releva a Ambrosio Ruiz, que sólo ha permanecido cuatro meses en el cargo. Como vicepatrona mayor y representante de los armadores queda Ángela Cana Astorga.

Alfonso Reyes, miembro de la UGT, lleva 26 años de su vida en el mar. Sobre la situación en que queda la flota barbateña tras el cierre del caladero del Golfo al boquerón, Reyes ha expuesto la "situación de desamparo" en que se encuentran los pescadores, "que no han recibido una información exacta de cómo estaba el caladero, viéndose precipitados a su cierre y al amarre de la flota por falta de rentabilidad".

Su llegada al cargo se produce en un momento complicado para el sector pesquero local, con el cierre de la pesca del boquerón, sin fecha para otro acuerdo con Marruecos y con una situación de dificultad económica para la Cofradía de Pescadores, que ha tenido que poner en manos de la Agencia Pública de Puertos de Andalucía (APPA) la lonja y la fábrica de hielo por las deudas que mantienen ambas entidades.

Uno de los peores problemas a los que tendrá que hacer frente Reyes es el agujero económico dejado por la lonja pesquera y la fábrica de hielo. Según apuntó "será ahora la APPA la que deberá hacerse cargo de ambas entidades, que siguen sin prestar sus servicios con normalidad a las traíñas que faenan en la bahía de Barbate". En el caso del hielo, los barcos tienen que hacerlo llegar en camiones a Barbate desde otros puntos de la provincia.