El Pleno de la Diputación Provincial aprobó ayer una proposición conjunta de PSOE e IU por la que se retira el nombramiento de Francisco Franco como presidente de honor de esta Corporación, anulando el acuerdo del pleno del 11 de julio de 1945.

Según defendieron los portavoces del grupo socialista, Olga González, y del izquierdista, José Antonio Barroso, con esta decisión se pretende dar cumplimiento a la Ley de la Memoria Histórica y "hacer justicia moral a los afectados". Por eso, el mismo acuerdo también reconocerá, mediante la colocación de una placa "sin dañar ningún edificio", a un total de 32 funcionarios de la Diputación que fueron "sometidos a expedientes de depuración por su conducta anterior al 18 de julio de 1936", según consta en un oficio del Tribunal Regional de Responsabilidades Políticas de Sevilla localizado en el archivo provincial de la Diputación.

El Partido Popular manifestó su abstención en este punto "por la interpretación de la ley de memoria histórica que se hace en el preámbulo del mismo", dijo su portavoz, Mercedes Colombo, que añadió que la ley hay que cumplirla y no presentar propuestas para su aplicación.

La otra proposición que salió adelante en una sesión con menos puntos y más corta de lo habitual fue la presentada por el PP para sustituir los actuales quitamiedos por guardarraíles de doble bionda en las carreteras de la provincia. La moción se aprobó por unanimidad y el grupo socialista anunció la firma de un convenio con la DGT para la implantación de los mismos entre los años 2009-2011.

Una propuesta popular para la mejora de la asistencia sanitaria en verano fue la que dio lugar al debate más intenso. La falta de apoyo de Izquierda Unida a la moción por "prudencia política y dar un margen de confianza al nuevo gobierno", según Barroso, fue criticada por Colombo, ya que IU presentó una moción parecida en 2005. "Nunca ha sido usted prudente en política", apuntó Colombo, que solicitó el mantenimiento de las camas, personal y quirófanos abiertos en los meses estivales. El PSOE criticó por su parte la visión "catastrofista" de la sanidad pública presentada por el PP. "Cuando se exagera se pierde credibilidad, aunque es verdad que hay problemas", apuntó el presidente Francisco González Cabaña, "y no haga caso y siga tan sensato como siempre (por Barroso)".

La pequeña gresca entre Barroso y los diputados populares continuó ya en los siguientes puntos, como la propuesta para la liberación del peaje entre Jerez y Dos Hermanas, que también fue rechazada. El portavoz de IU le recordó al PP que, aunque apoyara sus propuestas, su grupo y el popular sumarían 14 votos, mientras que el PSOE sumaba 15, ya que Manuel Prado (PA) no estuvo en el pleno. Tras su alusión a Llamazares, el pleno terminó hablando sobre a qué líder seguían cada grupo. Zapatero, Rajoy, Teófila o Arenas protagonizaron los últimos comentarios de un pleno que cerró con preguntas urgentes del PP.