Salvamento Marítimo rescató ayer a 40 inmigrantes a bordo de cinco pateras en aguas del Estrecho tras la avalancha de embarcaciones vivida el pasado sábado. Así, durante el pasado fin de semana, fueron interceptados en total 132 clandestinos en 19 barcas.

Salvamento Marítimo se tuvo ayer que emplear de nuevo a fondo para los rescates al persistir por la mañana el fuerte viento de levante con rachas superiores a 70 kilómetros por hora.

Los 40 subsaharianos cuando intentaban llegar a las costas españolas estaban repartidos en cinco pateras y las actuaciones se produjeron como consecuencia de llamadas de alerta realizadas desde las propias embarcaciones, según informaron a Efe fuentes de Salvamento Marítimo.

Los 34 tripulantes de las primeras cuatro embarcaciones fueron trasladados al puerto de Tarifa. El barco de salvamento Salvamar Gadir rescató a 24 inmigrantes que viajaban a bordo de tres lanchas neumáticas, mientras que la Salvamar Alkaid interceptó a diez inmigrantes que viajaban en una patera, entre los que había una mujer.

Las actuaciones fueron especialmente complicadas debido al temporal de levante existente en la zona, con rachas de viento de hasta fuerza 8.

Según informó a Europa Press Salvamento Marítimo, la quinta de las pateras fue rescatada por la tarde por un buque mercante en el canal sur del Dispositivo de Separación de Tráfico del Estrecho, y en ella viajaban seis inmigrantes. La Salvamar Gadir fue la encargada de realizar el transbordo de los pasajeros al norte de Ceuta, ya que el barco se dirigía hacia el Mediterráneo, y tras ello, fueron trasladados hasta el puerto de Ceuta.

El pasado sábado fueron rescatados 92 inmigrantes subsaharianos, entre ellos un bebé, a bordo de 14 pateras que fueron trasladados al puerto de Tarifa.

El presidente de Cruz Roja Española en Andalucía, Javier García-Villoslada, se mostró ayer "sorprendido" ante la avalancha de inmigrantes. Indicó que "sobrecoge", desde el punto de vista humanitario, "ver cómo algunos están llegando en lanchas casi de playa con el peligro tremendo que eso conlleva".

El presidente destacó la "perfecta" coordinación entre Cruz roja y Guardia Civil, tanto en la primera asistencia de ayuda humanitaria, donde hacen un pronóstico sobre ingresos hospitalarios y situación de menores; como en la posterior competencia de la Benemérita.

Para García-Villoslada, "el drama humanitario que está viviendo esta gente, les lleva, quizás, influenciados también por la publicidad de las televisiones, a creer que este mundo es mejor de lo que realmente es" y por tanto, "a lanzarse y arriesgar sus vidas" en las aguas del Estrecho.