San Fernando

San Carlos mira a los hospitales del futuro

Sala de tratamientos del hospital de día médico polivalente de San Carlos.

Sala de tratamientos del hospital de día médico polivalente de San Carlos. / Jesús Marín (San Fernando)

Ingresos hospitalarios solo cuando sean estrictamente necesarios y más en función de la complejidad del paciente que de las especialidades médicas, protocolos y circuitos más ágiles para la realización de pruebas diagnósticas permitan informar más rápidamente, un mayor protagonismo de la atención primaria, una enfermería más centrada en los cuidados, hospitalización a domicilio e, incluso, una perspectiva más social y no centrada exclusivamente en los problemas médicos de la persona. Así serán –o se pretende que sean– los hospitales del futuro, que atenderán a pacientes con perfiles de edades cada vez más avanzadas, dependientes, con diversas patologías, con una mayor cronicidad y complejidad a la hora de recibir tratamiento médico y, a menudo, con cargas sociales que afectan de lleno a su recuperación. En la medicina y en la enfermería se debate desde hace tiempo sobre estos nuevos enfoques mientras la edad de la población continúa creciendo sin parar.

Y en el hospital de San Carlos, en San Fernando, se tiende ya hacia ese modelo de los hospitales del futuro con los pasos que se están dando con la apertura de distintas unidades y servicios. En cierto modo, partir de cero una vez que el Ministerio de Defensa cediera las instalaciones al Servicio Andaluz de Salud (SAS) en 2014 ha facilitado las cosas para abordar ese enfoque. Y el papel que el centro isleño ha desempeñado en los peores momentos de la pandemia –y que todavía asume– da buena muestra de ello. 

En ese planteamiento, ha sido clave la reciente puesta en marcha del nuevo Hospital de Día Médico Polivalente, que empezó a funcionar en el pasado mes de noviembre en la cuarta planta de San Carlos –más de 900 metros cuadrados– tras una inversión que superó los 700.000 euros.

No se trata de un servicio nuevo. En realidad, el hospital de día abrió en el centro isleño en junio de 2015, apenas unos meses antes de que se empezara también con la hospitalización polivalente y comenzaran a llegar los primeros ingresos en planta. Pero las nuevas instalaciones suponen una mejora evidente y, lo más importante, la posibilidad de atender cada vez a más pacientes, de incorporar más tratamientos e intervenciones y de seguir ampliando la cartera de servicios y de afrontar nuevos retos para aprovechar el enorme potencial del hospital isleño.

Uno de los boxes preparados para atender a los pacientes del hospital de día. Uno  de los boxes preparados para atender a los pacientes del hospital de día.

Uno de los boxes preparados para atender a los pacientes del hospital de día. / Jesús Marín (San Fernando)

De hecho, se pretende también en el futuro habilitar en este nuevo espacio una unidad de cuidados intermedios para pacientes semicríticos que precisen de una mayor vigilancia y atención. Eso permitiría también tener en el hospital isleño a pacientes agudos que en un momento de crisis pudieran tener estos cuidados que no se brindan en planta.  

Las cifras están ahí. En 2021 se practicaron en el hospital médico de día unas 6.000 intervenciones entre tratamientos, técnicas y procedimientos de enfermería. Y con las nuevas instalaciones de la cuarta planta el dato puede llegar a multiplicarse fácilmente. Es desde luego lo que se pretende desde el hospital isleño. 

En todo este enfoque hay siempre un objetivo claro, señala Daniel García Gil, jefe de Servicio de Medicina Interna del Hospital de San Carlos: reducir los ingresos. Y el enfoque polivalente que se aplica en el centro isleño unido a una coordinación con la atención primaria que cada vez es más fluida -advierte– no suele prodigarse en otros hospitales.

"La hospitalización, tener las camas llenas de un hospital, en realidad es un fracaso. Siempre que un enfermo esté en condiciones de estar en su casa, con su familia, en su entorno, estará mejor. Los hospitales del futuro van, precisamente, a eso: a una atención domiciliaria o en hospitales de día de manera que los ingresos se hagan únicamente cuando no haya más remedio, cuando se trate de procesos agudos", explica. Porque el perfil de esos pacientes también va a demandar ese tipo de enfoque al ser cada vez personas más mayores, con más problemas de salud.

El doctor Daniel García Gil, director de la Unidad de Gestión Clínica de Medicina Interna y Urgencias del Hospital de San Carlo.s El doctor Daniel García Gil, director de la Unidad de Gestión Clínica de Medicina Interna y Urgencias del Hospital de San Carlo.s

El doctor Daniel García Gil, director de la Unidad de Gestión Clínica de Medicina Interna y Urgencias del Hospital de San Carlo.s / Jesús Marín (San Fernando)

Y ahí es donde el papel del hospital de día cobra un especial protagonismo al permitir a los pacientes acceder a los tratamientos que necesita durante el tiempo que precise sin tener que quedarse ingresado en el hospital. "Aquí se administran tratamientos periódicos de diferentes especialidades. Y eso es lo importante: su carácter polivalente. Los hematólogos nos mandan a pacientes para ponerle hierro, el neumólogo para ponerle un tratamiento para el asma, si precisa una transfusión se hace, si tiene mucho líquido se le pone diurético... Y si tiene que venir varios días seguidos para un tratamiento intensivo, el paciente viene... Pero se evita el ingreso, que es uno de los objetivos de este tipo de dispositivos", afirma.

La idea, claro, es también que cada vez se puedan asumir a pacientes más complejos, por ejemplo, los que reciben tratamiento de quimioterapia, aunque eso –puntualiza el doctor Daniel García Gil– también precisaría de reformas previas en el servicio de farmacia.

La práctica totalidad de los pacientes que se atienden en el hospital de día de San Carlos son de San Fernando, que se ahorran además tener que desplazarse hasta el Puerta del Mar para ser atendidos. Es, sin duda, la gran ventaja que ha deparado la apertura del antiguo hospital militar para los vecinos de La Isla.

La nueva unidad que se ha habilitado en la cuarta planta dispone de 11 consultas y de una amplia sala de tratamiento con 10 sillones y 4 boxes con camas, además de sala de reuniones multimedia –habilitada para videoconferencias que permiten hacer sesiones clínicas con otros hospitales– y otras dependencias auxiliares. Funciona desde las 8.00 hasta las 17.00 horas. Y los pacientes se derivan desde Urgencias –casos agudos– o bien desde el médico de atención primaria. Son las consultas de alta resolución, en las que un paciente dado el problema que presenta puede ser atendido en 24 o 48 horas, se le piden las pruebas complementarias que necesita –un TAC, una biopsia...– y en el plazo de una semana o 10 días puede estar ya informado. "Y todo se hace de manera ambulatoria para de nuevo evitar ingresos", apunta Daniel García al valorar el funcionamiento de estas consultas, de las que en 2021 se llegaron a atender 3.000 en este centro. Se trata, explica, de esos pacientes que el médico de atención primaria, al advertir de un posible problema grave, derivaba a urgencias y, una vez allí, ingresaba en planta.

El doctor Daniel García Gil, junto a Alicia Crespo Espinosa, coordinadora de casos y supervisión, mientras explican cómo funciona el hospital de día médico. El doctor Daniel García Gil, junto a Alicia Crespo Espinosa, coordinadora de casos y supervisión, mientras explican cómo funciona el hospital de día médico.

El doctor Daniel García Gil, junto a Alicia Crespo Espinosa, coordinadora de casos y supervisión, mientras explican cómo funciona el hospital de día médico. / Jesús Marín (San Fernando)

La alta resolución –apunta– es una de las grandes virtudes de los hospitales de día al brindar un diagnóstico rápido. "Permite que pacientes con problemas que pueden ser potencialmente graves no lleguen a ingresar en el hospital porque se encuentran en condiciones de estar en el domicilio y, a través de un circuito ágil de exploraciones, se pude diagnosticar en poco tiempo", explica. Y en todo esto, subraya, "la atención primaria es vertebradora".

En todo este circuito en el que se basa el funcionamiento del hospital de San Carlos se pretende "una unidad de continuidad asistencial" como alternativa a la hospitalización convencional que va desde la atención primaria –que asume "un protagonismo fundamental"– al hospital con los recursos intermedios que brinda: el hospital de día médico con la consulta de alta resolución y la hospitalización polivalente para aquellas personas que no tienen más remedio que ingresar, que es la otra pata del centro sanitario isleño. El año pasado, por cierto, se tramitaron unas 2.000 altas, lo que da buena cuenta de la actividad asistencial que viene registrando el centro.  

Todo ese nuevo enfoque hacia el que se quiere orientar a los hospitales y hacia el que mira ya San Carlos, claro está, afecta también a la enfermería, como apunta también Alicia Crespo Espinosa, coordinadora de Cuidados. "Es algo que ya nos estamos encontrando en el hospital. Vemos a pacientes que por su complejidad necesitan más cuidados de enfermería, con gran dependencia, con una movilidad muy reducida, deterioro cognitivo... Son, en definitiva, pacientes con una alta complejidad de cuidados que van más allá de la medicación, de sacar sangre o poner una vía... Y eso requiere que en la ratio haya también más técnicos de cuidados auxiliares, de celadores que manejen a los pacientes, técnicos de cuidados a personas en situación de dependencia.. Y a lo mejor incluso es prioritario contar con fisioterapeuta en el equipo, con nutricionista, un logopeda...", explica. 

Sala de tratamientos del hospital de día médico polivalente de San Carlos. Sala de tratamientos del hospital de día médico polivalente de San Carlos.

Sala de tratamientos del hospital de día médico polivalente de San Carlos. / Jesús Marín (San Fernando)

Desde el hospital isleño se trabaja incluso en un proyecto para la hospitalización domiciliaria en centros sociosanitarios –en las residencias de mayores– que facilitó incluso las intervenciones que se han llevado a cabo durante la pandemia. "Esos pacientes –explica Daniel García– vendrán al hospital pero, cuando empiecen a recuperarse, llevaremos el hospital al centro sociosanitario, con los recursos de farmacia, médicos, de enfermería...", apunta.

Y hay más planes de cara al futuro: un circuito específico de urgencias para pacientes frágiles, una unidad de convalecencia para que personas con lesiones se recuperen y aprendan a desenvolverse en el día a día... Es el camino que el hospital de San Carlos ya ha iniciado de cara a los hospitales del futuro.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios