Las vísperas regatean el mal tiempo en una tarde cofrade
Las seis hermandades que este año salieron el Sábado de Pasión escribieron un bonito y ambientado prólogo a la Semana Santa con buen ambiente en las calles
EL prólogo de la Semana Santa de Jerez se hizo más grande -aún- durante la jornada de ayer. El Sábado de Pasión se abrió ante Jerez con seis hermandades que realizaron su estación de penitencia. Sin embargo, fueron siete las que pusieron rumbo hacia sus respectivas sedes. La asociación parroquial de La Misión se hizo mayor en la Basílica de la Merced y se convirtió en la cuadragésimo quinta hermandad que completa -por ahora- el cartel de la Semana Santa jerezana.
El día, espléndido en lo climático con alguna tímida nube en el paisaje, permitió que todas las corporaciones comenzaran con normalidad su estación de penitencia. Las primeras en emprender esta misión fueron San Rafael, desde la parroquia a la que le da nombre, y La Salvación desde la parroquia del Perpetuo Socorro. Le siguieron La Sed y Pasión, mientras que por Guadalcacín empezaba a dar sus primeros pasos la de La Entrega. Más tarde, a las nueve y media de la noche, lo hizo la hermandad de la Mortaja que este año retrasó algo más su hora de salida, lo que les viene de perlas porque es una cofradía que por su estilo busca más la penumbra y el recogimiento de la noche. En total, seis hermandades recorrieron la ciudad literalmente desde sus cuatro puntos cardinales, dos de ellas -Sed y Salud- casi coincidiendo el paso por el Arenal dado que la de la parroquia de San Juan Grande y la Candelaria iba a San Miguel, como todos los años, mientras que la de San Rafael, también llegando de la zona sur de la ciudad, recalaba excepcionalmente este año en San Francisco donde temporalmente tiene su sede la Hermandad del Cristo de la Expiración. Así, esa zona del centro urbano se convirtió en un lugar de obligado encuentro y de espera para ver pasar a ambas cofradías y disfrutar de sus formas en una tarde que hubo un gran ambiente en las calles de gente buscando los lugares donde ver pasar a las hermandades, como sucedió por la zona de la Plazuela por donde este año la Hermandad de Pasión se sumergió por primera vez para llegar hasta Las Angustias. Otra hermandad que modificó su itinerario fue la de La Salvación que entró más por el añejo barrio de San Juan para llegar a la iglesia de la Victoria, donde hace su estación de penitencia.
Avanzada la tarde, con la noche casi encima, el cielo no daba noticias negativas en forma de lluvia, por lo que todo transcurría con tranquilidad. El jefe de día del Consejo, Dionisio Valencia, controlaba el ritmo de la tarde sin incidencias notables en el tránsito de las hermandades de una jornada sumamente complicada para controlar debido a la variedad de recorridos que en el Sábado de Pasión no tiene un punto común de confluencia como puede ser el resto de días con la Carrera Oficial. Y no será por la tentación que ha habido en algún momento de 'ordenar' un día que debe y tiene que ser como es por mucho que no sea cómodo para el que ve o controla; para orden y concierto está la Semana Santa y las vísperas son lo que son.
En cuanto a estrenos, al ser hermandades que siguen conformando su patrimonio más básico, destacar el acabado de la talla del singular paso de la Mortaja, la incorporación de nuevas figuras en el misterio de La Salvación, la cruz de guía de esta hermandad así como el tallado de los candelabros del paso. En La Salud han seguido con la talla del paso y han incorporado algunos elementos de orfebrería. Pasión que también aumenta su altar de insignias con nuevas varas de presidencia. Precisamente, esta hermandad que tiene su sede muy lejos, casi a la vera de la Ronda Juan Carlos I, o del Colesterol, se espera que para 2017 entre en Carrera Oficial para lo que la cofradía ya se ha venido preparando desde hace cinco años en el Sábado de Pasión.
Ya en 2015 decidieron venir al centro urbano para hacer estación de penitencia en la capilla de Las Angustias. Fue como probarse de cara a la aventura de llegar al centro, algo que les satisfizo y que superaron con éxito pese a ser algo más de ocho horas de procesión. Solo les resta que se confirme su paso a la Semana Santa para el año próximo y cabe la duda de si será la única que lo haga.
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