Las genuinas mijitas del freidor, las que el gallego vendía a cinco pesetas el cartucho, se devoraban a puñados; las otras mijitas gaditanas, las literarias de Fernando Quiñones, debían ser saboreadas con lentitud para descubrir en sus breves líneas las altas intenciones que el escritor chiclanero escondía entre sus escogidísimas palabras. En 2013, Blanca Flores logró recopilar aquellos soberbios microtextos que Quiñones publicó en Diario de Cádiz, y ahora, cinco años después, en plena reivindicación de este autor en el llamado Año Quiñones, Blanca Flores ha rescatado aquellos sueltos periodísticos que más tenían que ver con Cádiz y los ha enfrentado a una selecta nómina de gaditanos que revisan e interpretan la ciudad que entonces veía Fernando en sus textos.

Mijita a mijita: el Cádiz de Fernando Quiñoneses el título de este libro que, editado por Cazador Editorial, se presenta el próximo lunes, 4 de junio, a las 20,00 horas, en la sede de la Fundación Caballero Bonald (C/ Caballeros 17). Junto a la coordinara del libro estarán Yolanda Vallejo, Juan José Téllez y Josefa Parra.

La coordinadora estará acompañada por Juan José Téllez, Yolanda Vallejo y Josefa Parra

Considera Blanca Flores que editar de nuevo las 'Mijitas' de Quiñones, cuando se van a cumplir 20 años de su muerte, era "necesario". De aquella primera publicación de hace cinco años, la que sacó adelante con Ediciones El Boletín, se han respetado muchas cosas en sus páginas, como los prólogos de Emilio López y Mariela Quiñones y la portada original de Paco Rocha.

A partir de aquí se inicia el trabajo coral que ha hecho posible este libro: la revisión, interpretación y análisis de aquellos breves y brillantes textos de Quiñones que tanto Cádiz encerraban y en los que el escritor mostraba su preocupación por todas las cosas que sucedían, y por las que no, en su ciudad adoptiva, que ahora se ven con la perspectiva que dan el nuevo siglo y los 25 años transcurridos desde su publicación.

Y cada uno se ha encargado de un apartado temático de los muchos que trató Quiñones. Así, Tamara García escribe un texto relacionado con el periodismo; Desirèe Ortega lo ha dedicado a Alcances; Javier Osuna, al flamenco y al carnaval; Yolanda Vallejo habla del mercado, y Julio Malo de Molina escribe sobre arquitectura.

El elenco de autores que participan en el libro continúa con Fernando Santiago y sus referencias a Cádiz como ciudad universitaria; Manuel J. Ruiz Torres y la gastronomía gaditana; Juan José Téllez y las tempranas voces artísticas de la época, hoy consagradas, que Quiñones destacaba ya en sus textos; Josefa Parra y su vinculación con Bonald, y Carmen Morillo con una historia personal y periodística relacionada con Fernando.

Mijita a mijita, con una portada diseñada por Salvartes y una fotografía de Quiñones de Joaquín Hernández, Kiki, se completa con un poema de Carmen Moreno, un prólogo de Nadia Consolani para una publicación de Ruiz Torres que nunca vio la luz, y una divertida entrevista que Juan Manzorro hizo al escritor y que se publicó hace años en la revista Cambalache.