Escribía en el año 2012 un artículo denominado ‘Gracias Jerez’ en el que finalizaba dando las gracias a toda la ciudad por cómo nos recibió y acompañó a lo largo de todo el recorrido con motivo de la salida extraordinaria del L aniversario de la bendición de Ntra. Sra. de la Estrella. Y cómo nos demostró un cariño, amor y devoción especial hacia nuestra Bendita Imagen Titular. Un amor que yo creía que, aunque el decreto de coronación canónica no se había promulgado, sentíamos, en mi opinión y la de muchos cofrades de nuestra hermandad y otros muchos jerezanos. Pensábamos que había sido coronada por el pueblo, por los cofrades y por toda la multitud de personas que estuvo al lado de la Madre de Dios alabando su nombre con respeto, cariño y amor.

Incluso el periodista cofrade jerezano Quico Abuin en la crónica (por cierto, muy bonita) que, sobre este acontecimiento se vivió en nuestra ciudad. Crónica firmada el dia 3 de Junio de 2012 y que terminaba con las siguientes palabras: “Sólo hubiera faltado rematar todo esto con el ansiado anuncio de la coronación canónica de la imagen, que sin duda sucederá tarde o temprano. Aunque ayer, los devotos, la gente y los cofrades de la Borriquita la coronaron en las calles”

Ahora, ocho años después, nuestro sueño y el deseo de muchos cofrades jerezanos se ha hecho realidad, y hemos tenido la dicha de oír, por fin, el decreto en el que se concede la Coronación Canónica de Ntra. Sra. de la Estrella.

Cuántos recuerdos de todos los hermanos de nuestra Hermandad hemos tenido sobre todo el pasado domingo cuando de boca del delegado diocesano de Hermandades y Cofradias oímos el decreto en el que se nos daba esa feliz y esperada noticia. Fueron momentos tan emocionantes y sentidos los que vivimos en aquellos instantes, en los que, además, nos hemos acordado de aquellos hermanos de nuestra Hermandad que ya no están con nosotros, aunque nos queda el consuelo de que Dios ha querido que puedan gozar de la presencia de la Santísima Virgen y alegrarnos junto a nosotros.

Han sido años de rezos, oraciones, peticiones, esperanza y hemos tenido siempre la confianza de que Dios nos concedería el inmenso honor y alegría de coronar canónicamente a la Santísima Virgen de la Estrella con la corona celestial que goza en el cielo al lado de su hijo Jesucristo.

Nuestro sagrado titular, Cristo Rey, como no podía ser de otra manera, y tras el ruego de su Santísima Madre, también ha oído nuestras oraciones y ha hecho posible que podamos sentir este acontecimiento. Un momento para nosotros muy especial los que hemos vivido en estos días.

Doy gracias a Dios por ello, por haberme dado salud para poder ver este momento tan deseado. Gracias por lo que nos concedes a todos nosotros, a nuestra Hermandad y a los hermanos. Especialmente a mi familia, que, lo mismo que todos los hermanos, tiene en su alma y corazón ese amor hacia la Madre de Dios en su advocación de Ntra. Sra. de la Estrella.