"Me siento indignado e indefenso ante el Comité de Competición". Con estas palabras expresaba ayer su malestar Francisco Javier Lledó después de conocer los dos partidos de sanción recibidos por su expulsión en el Villamarín.

El meta xerecista relató que "hubo un comentario en el banquillo, el auxiliar mira, llama al árbitro y no pensé en ningún caso que fuera yo. Mi sorpresa fue cuando me llama a mí, me enseña tarjeta roja pero no me dejaó hablar con él, ni en el momento ni después del partido. Le quería decir que yo no había sido, pero en estos casos los árbitros no permiten nada. Él me dice que acepta las disculpas, que encima me tuve que disculpar, y me ponen dos partidos. Yo no soy de polémicas con los árbitros, pero esto no es justo, me sancionan que es una cosa que no he hecho".

Mientras tanto, la otra cara de la moneda la protagonizó Toni. El arquero xerecista confiesa sentirse "preparado para jugar en cualquier momento" y aunque a día de hoy sabe que de principio ocupará plaza en el banquillo, admite que el sábado "después de ver la expulsión de Lledó y la lesión que tenía Chema me vi jugando contra el Valladolid. Luego no será así pero estoy listo".

El canterano reconoce haberse "alegrado" por los debuts de Adri Cuevas y Luisma asegura que "es algo que me da más fuerza para seguir peleando, estoy convencido de que este año tendré mi oportunidad".

Es más, el propio cancerbero se siente "mejor que otras temporadas, no sé si será porque es mi último año, porque ya tengo experiencia o no sé, pero tanto en los entrenamientos como en los partidos con el B me veo fenomenal".

Por lo demás, el equipo trabajó en doble sesión, una matinal en Rota y otra en Chapín por la tarde. En ninguna de ellas estuvieron presentes Lledó y Capi, ausentes por motivos personales.