La historia interminable

La salida de Ricardo García del Xerez se ha convertido en la historia interminable. El presidente azulino lleva asegurando que se marcha hace ya varias semanas pero no termina a de dar el paso. El día que lo haga, si es que finalmente lo hace, nadie le va a creer.

Las próximas 48 ó 72 horas se antojan decisivas para el futuro de la entidad y el presidente xerecista no duda al admitirlo. "La situación es límite, hemos aguantado como hemos podido todos estos meses. Llevamos mucho tiempo luchando solos, es bastante triste que toda la gente haya abandonado al Xerez. Lo más fácil por mi parte hubiese sido echar el cerrojo pero no me rindo tan fácilmente y mientras hay vida siempre hay esperanza".

Está manteniendo contactos con varios grupos y aún no tiene claro con cual de ellos cerrará el acuerdo pero sí que "me aparto, lo puedo asegura al cien por cien. Uno de los grupos con los que estamos negociando se quedará con la gestión de la entidad. Si no me he ido antes es porque no había nadie dispuesto a ayudar. A partir de ahora, yo no gestionaré nada. El grupo Energy seguiría siendo el dueño de las acciones, que ahora mismo tienen el valor que tienen, y punto".

Ricardo, lanzado en sus reflexiones en voz alta, añade: "Yo he llegado hasta aquí, he puesto mucho dinero, incluso de mi bolsillo, y yo tengo más. Nos han puesto mil trabas y mil zancadillas y he logrado mantener el club vivo hasta ahora. Si no lo hubiese hecho, no habría opciones de que entrase nadie. Aquí de lo que se trata es de que el club sobreviva y al final de temporada tenemos que llegar".

Sabe que las acciones a día de hoy no tienen valor y a la hora de explicar qué gana Energy dando el paso al lado, resalta. "Ahora mismo nada. No tenemos margen económico y tenemos que ceder la gestión. En el futuro ya se verá si hay opción de compra o no en función de la viabilidad que pueda tener la entidad. En estos momentos, estamos luchando por quedarnos en Tercera pero la próxima temporada no sabemos en qué categoría podemos militar, hay un recurso aún pendiente. El Oviedo estaba muerto hace unos meses y ahora lucha por ascender a Segunda A con el respaldo de sus aficionados y la llegada de unos inversores. Los inversores que quieren entrar en la entidad son gente de fútbol, quieren que el Xerez sirva de escaparate a sus jugadores y hay que dejar que lo intenten. A los futbolistas que estuvieron aquí hasta diciembre no les fue nada mal, todos están jugando y hasta el entrenador ha encontrado un equipo de Segunda B. Está muy mal pero el Xerez sigue siendo un escaparate. Ricardo y Energy lo único que quieren es que el club se mantenga vivo. Yo estoy deseando dar un paso al lado. Como he comentado antes, si no lo he hecho es porque no había nadie. Si yo me iba, el club se moría".

En su decisión de dar un paso lado, eso sí, aclara que nada ha tenido que ver la falta de respaldo por parte de la poca afición que le queda al Deportivo ni que le hayan pedido que se marche. "Eso no me afecta, desde el principio hay gente gritándome Ricardo vete ya. Ahí también contesto una vez más lo mismo, para que yo me marchara tenía que entrar alguien y no había nadie. Ahora, sí. Si tengo a mi padre que se está muriendo, no lo abandono como ha hecho todo el mundo aquí. Hemos estado limitados desde el principio y no hemos tenido herramientas para trabajar. El año pasado la Liga se hacia cargo de muchos pagos y esta temporada nadie paga nada y no hay taquillas, ni publicidad, ni socios".

Ricardo se ha quedado sin apoyos dentro y fuera del club y tanto Higuera como Chicha pueden decir adiós en las próximas horas si él no les ofrece garantías y si no cierra un acuerdo favorable para los intereses de todas las partes. Lejos de apagar el fuego, no se corta: "Chicha es mi amigo desde hace muchos años y lo seguirá siendo pase lo que pase y con Paco mi relación no es de amistad como con Chicha pero siempre ha sido buena. En estos momentos, lo que puedo decir es que son dos personas importantes pero no imprescindibles y si toman la decisión de marcharse, habrá que respetar su opinión. Los únicos importantes en estos momentos para mí son los jugadores, que son los que tienen que sacar adelante la situación deportiva de la entidad. Lo más importante en el club a día de hoy es la plantilla".

El pasado fin de semana, no apareció y los empleados del club se tuvieron que movilizar para conseguir dinero para el desplazamiento del equipo juvenil de División de Honor a Almería y para pagar al árbitro del encuentro ante el Sevilla. El presidente azulino se limita a comentar que "es triste y a nadie le gusta esa situación pero no había dinero. Vamos a intentar por todos los medios que eso no se vuelva a repetir. No tenemos respaldo y se va a seguir pagando. Yo quiero dejarlo claro, las opciones son la liquidación porque no tenemos más dinero o ceder la gestión a quienes sí lo tienen y en ello estamos".