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"Con el término 'frikis' Tebas se quedó corto"

Rafael Mateos, presidente en funciones, lamenta la imagen ofrecida por Energy porque "ha hecho daño al club, a la afición y a la ciudad". Asegura que no tiene constancia de ningún pago y admite: "Dijeron que pondrían dinero y luego no ha sido así"

Momento de la presentación del cartel del encuentro ante el Alcoyano./Cedida por Xerez CD
M. Romero

17 de febrero 2012 - 05:02

Mateos explicó que "ha sido una empresa o un grupo que dijo tener dinero y que podía inyectar solvencia económica a la entidad y luego no ha sido así ni muchísimo menos. Tengo que pensar que todo esto ha supuesto una página que hay que pasar cuanto antes porque ha hecho muchísimo daño tanto al club como a la afición y a la ciudad, a todos en general. Cuanto antes pase y se olvide, mejor que mejor".

En cuanto a la posibilidad de que Energy tenga opciones de recuperar el control de la entidad, aclaró que "ese tema lo decidirán los juristas. Se hicieron unas escrituras de compraventa en las que aparece una cláusula en la que se dice que si no cumplían con los pagos, automáticamente todo volvía a la situación inicial y en esas estamos".

Jesús Gómez, ya ex presidente azulino pero aunque aún accionista minoritario, ha asegurado haber pagado a Joaquín Morales 100.000 euros de los 300.000 de salida por la compra de las acciones. Mateos no quiso mojarse en ese tema porque "yo no he visto ese pago y no puedo opinar sobre él, no lo sé. Morales me dice que él no ha cogido nada. Yo tenía unos pagarés para el pasado día 10, acudí a la entidad, por supuesto, no tenían fondo y nada más".

La imagen mostrada por el grupo inversor tampoco ha sido del agrado del actual presidente en funciones xerecista, que recordó sus primeros contactos con los empresarios de este grupo. "Yo a Ricardo García le he visto una vez y siempre me lo presentaron como un intermediario de la operación. Jesús Gómez estuvo un día aquí en Jerez, estuve hablando con él como arquitecto, me transmitió algunas de las ideas que quería desarrollar en el Xerez y le vi positivo. Luego, de la noche a la mañana, cuando cogió la presidencia no sé qué pasó. Cuando llegué a mi casa y vi la que se había montando aquí la verdad es que me quedé frío".

En cuanto a la solvencia económica del grupo y a la garantía que les transmitió Energy a la hora de vender, Mateos dejó la pelota en el tejado de Joaquín Morales: "Las garantías en este tema, las que vio Morales. A mí me dijo que tanto él como Tebas habían visto los nombres de la sociedades que iban a comprar el club y que eran buenas. Había otra serie de personas de Sevilla vinculadas al mundo del fútbol, concretamente al Sevilla, que se comentaba que iban a venir aquí pero luego no fue así. Yo lo que manejaba eran comentarios, me explicaron que su intención era la de recalar en el Xerez para fomentarlo y a mí me pareció importante. A mí, personalmente, me comentaron que iban a poner 300.000 euros y que iban a poner a un entrenador que no era Vicente, aunque yo les dije que había que probar primero con lo que había en casa, que no había que gastar tampoco tanto dinero, que con menos, para cuatro meses, estaba bien la cosa y hasta ahí llego. Parecía que era un grupo fuerte y así ha sido, parecía. No era nada".

Tampoco le importó comentar la posible presencia de Jesús Gómez en Chapín en el encuentro ante el Alcoyano. "Si viene a Chapín será como aficionado, pagará su entrada y punto. No pertenece al consejo y no pertenece al club, no sé si quedarán flecos pendientes con las acciones o no pero si viene, tendrá que pagar".

El empresario jerezano no se cortó a la hora de catalogar la puesta en escena de Energy en la sala de prensa de Chapín y aseguró que "Javier Tebas se quedó corto en su rueda de prensa hablar de todos ellos. Ya he comentado antes, que yo había hablado antes con Jesús Gómez y me pareció un caballero, me dijo que iban a poner dinero, luego no lo hicieron y montaron el pollo que montaron aquí. Sinceramente, lo de frikis me parece corto".

A estas alturas de la película y con la que está cayendo, Mateos no se plantea marcharse de la entidad y no le gustaría que hasta el final de temporada hubiesen más cambios en el consejo de administración. "Quedan sólo cuatro meses para el final de Liga y en este periodo de tiempo, lo que me gustaría es que el consejo anterior retomara sus funciones y en estos meses buscar soluciones. Yo siempre tengo ganas de trabajar por el Xerez y eso no ha cambiado en todo este tiempo".

De su situación personal como presidente en funciones, no quiso hablar demasiado y lo supeditó todo al consejo de administración que se celebrará la próxima semana. "En esa reunión realizaremos una planificación y analizaremos qué proyecto se puede hacer. A mí me da igual que el presidente sea yo o que sea Francisco Javier López Ballesteros. La entidad está en concurso de acreedores y la gestión la realizan los administradores, nosotros, como Millán o Juan María Vaca, podemos trabajar en otras funciones. De todos modos, más cambios no serían buenos, el concurso está en su fase final y lo que necesitamos es paz social y estabilidad para sacarlo adelante con el esfuerzo de todos".

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