Dos acciones a balón parado bastaron al Racing de Ferrol para dar un nuevo paso hacia la salvación a costa del Cádiz, que tras caer por 2-1 en A Malata se complica el tramo final de temporada. Un castigo excesivo para el cuadro amarillo, que salió al terreno de juego mucho más enchufado que el conjunto gallego, que se vio lastrado por la desidia del trivote formado en la medular por Nicolas Camí, Rubén García y Roberto Sousa, que ni construyeron, ni ayudaron en la destrucción.

Circunstancia que no supo aprovechar el Cádiz, que con la excepción de un remate de cabeza de Dani y un lanzamiento de falta del argentino Gustavo López apenas inquietó la meta de Queco Piña.

Lo mismo que el Racing de Ferrol, que fue incapaz de acercarse con peligro a la portería de Contreras, protagonista involuntario del primer tanto gallego. Nadie podía imaginar que la falta botada por el central francés Johann Charpenet desde unos 45 metros pudiera generar peligro, sin embargo, el zaguero estuvo más pillo que el meta y sorprendió con su disparo a un adelantado Contreras.

Todo un mazazo para el Cádiz, desconcierto que se transformó en zozobra con el segundo tanto local, obra del también central Jonathan Martín, que remachó a los cuarenta y cuatro minutos en el segundo palo un balón prolongado por el ex cadista 'Cacique' Medina en una falta desde la derecha de Álvaro Antón.

No le pudo venir mejor el descanso al Cádiz, que con la entrada de Gastón Casas y Enrique se lanzó en busca de al menos el empate, que a punto estuvo de lograr. En un saque de falta botado por Enrique llegó el 2-1 para el Cádiz, tras ganar Fleurquin la partida a toda la zaga gallega, que vivió tres minutos de pánico. Miguel pudo firmar un minuto más tarde el empate pero Charpenet desvió bajo palos segundos ante de que el propio Enrique volviese a poner en apuros a Queco Piña.

Pero el Racing fue durmiendo el choque para ganar y dejar al Cádiz mirando con preocupación los puestos de descenso.