Agustín Vidal-Aragón, director de BBVA en Andalucía y Extremadura, aprovechó ayer la presentación de los resultados de Situación Andalucía en el primer semestre de 2013 para dar a conocer una novedosa iniciativa de esta entidad, el Círculo de Innovación de Andalucía, el CIAN. Se trata de un punto de apoyo para las empresas de la región que crean en la innovación y que apuesten por I+D como elemento diferenciador. "Incluso si las empresas no hubieran querido internacionalizarse, lo habrían tenido que hacer en un mundo globalizado", dijo para situar el marco actual en el que nos encontramos. Esto trae, necesariamente, un mercado más competitivo y para abrirse paso en él son necesarias "estrategias de diferenciación".

De ese pensamiento nace el CIAN, según señaló Vidal-Aragón, que espera que este Círculo sea "una palanca para el liderazgo andaluz en innovación, que es, junto a la calidad del capital humano, pieza clave en cualquier economía y que debería considerarse una cuestión de Estado".

Para Vidal-Aragón, una sociedad competitiva tiene que sustentarse en dos catalizadores: la innovación y la educación. Frente a otras estrategias que se están mostrando poco útiles, como pudiera ser la competencia a través de la reducción de precios, el BBVA apuesta por la calidad y la investigación como transformadores del tejido productivo.

Animó a los numerosos empresarios presentes ayer en el hotel Atlántico de Cádiz a que se sumasen a esta iniciativa y que apostaran por invertir en ese elemento diferenciador y que no está tan lejano como pudiera parecer. De hecho, tras muchos años a la cola, el esfuerzo en I+D en Andalucía se está aproximando, de forma paulatina, al del producto nacional. A esto se suma, como demuestra la pujanza de las exportaciones, una internacionalización de las empresas andaluzas, ganando cuota con respecto a otras comunidades en el mercado exterior.