Ventorros de Balerma es un tranquilo pueblo situado a escasos metros del embalse de Iznájar que, como tantos otros, vive estos días la campaña electoral de las municipales. En sus calles se pueden ver pegados carteles que dan a conocer a los candidatos, que acuden a explicar sus programas electorales y a pedir el voto a los vecinos en sucesivos mítines. Hasta aquí todo normal. Pero el 22 de mayo los ventorreños no van a participar en las mismas elecciones. Cada vecino, dependiendo de la parte del pueblo en la que esté empadronado, votará a un alcalde distinto y decidirá la composición de un ayuntamiento diferente, el granadino de Loja o el cordobés de Iznájar.

Ambos municipios fronterizos comparten la gestión de esta pedanía. Es una calle, la del Límite, la que divide administrativamente esta aldea de casi 400 vecinos. Sus habitantes comparten pueblo, calles y equipamientos, pero no municipio ni provincia, de ahí que cada vecino vote según la localidad a la que pertenezca.

Estos vecinos viven esta situación como algo totalmente normal. "Aquí no notamos en nada que seamos dos provincias", asegura el lojeño José María. "Nos llevamos muy bien, nadie dice 'tú eres de aquel lado y tú del otro'. Aquí estamos todos revueltos", afirma Ana, una ventorreña de Iznájar que tiene familia en la parte de Loja.

Aunque a la hora de votar, sí que hay diferencias. En la Balerma lojeña hay censados 205 electores, que ejercerán su derecho a voto en el Consultorio de Salud situado en esta parte, en la calle principal del pueblo. Sin embargo, la parte de Iznájar, que ha perdido población estos últimos años, tiene menos de 200 votantes, el límite fijado por la ley para que haya una mesa electoral. Por ello, sus 115 votantes tendrán que desplazarse unos siete kilómetros para ir a votar a Fuente del Conde, en territorio cordobés.

Muchos de los ventorreños de Iznájar no están de acuerdo con este cambio. Francisco asegura que siempre ha habido una urna en la parte de Iznájar: "Ahora alguien nos tiene que llevar a votar porque yo no tengo coche". Más reivindicativa se muestra Ana: "La parte de Granada vota en el pueblo y los de Iznájar tenemos que desplazarnos unos kilómetros para ir a votar, cuando siempre lo hemos podido hacer en el pueblo. Se nos quita un derecho que hemos tenido siempre", denuncia.

Ana relata que está enferma y que muy probablemente no votará. Precisamente la abstención es una de las principales preocupaciones de los candidatos de Iznájar. El del PP, Cipriano Galeote, asegura que saldrán perjudicados al no haber mesa en Balerma. "Nos consta que hay vecinos que son reacios a tener que ir a votar a una aldea que tampoco es más grande que Ventorros". Aunque el día de las elecciones el Ayuntamiento de Iznájar pondrá un autobús para aquellos ventorreños que deseen votar.

Ya sea en el Consultorio o en Fuente del Conde, cada vecino sabe dónde tiene que votar y a qué candidatos, algo que no siempre ha sido así. "En las primeras elecciones democráticas teníamos muchos errores de personas que votaban con papeletas cambiadas", recuerda el candidato socialista de Loja, Miguel Castellano. "Con el paso del tiempo la gente tiene afortunadamente el hábito del voto y ya distinguen, por ejemplo, que si están empadronados en Granada tienen que votar a la candidatura de Granada", explica. Al estar dividido el pueblo en dos, se podría pensar que los mítines se duplican, pero no. "Nosotros no hacemos dos mítines, sino uno solo. Lógicamente los mensajes electorales del PSOE de Iznájar y el de Loja para Balerma son coincidentes, porque son programas compartidos", asegura Castellano.

El PP también realiza un mitin conjunto en Ventorros, en el que participa el candidato de Iznájar y la de Loja. Es la primera vez que lo hacen de esta forma. Según explica Cipriano Galeote, "nos hemos comprometido con los vecinos a que las propuestas que surjan la hagamos de forma conjunta. Por una razón: la aldea tiene conciencia de ser un solo pueblo, no dos".

Todos los mítines se realizan en el salón de usos múltiples de Ventorros, situado en la parte de Iznájar. "El mitin está solicitado ante la Junta Electoral de Córdoba por el PSOE de Iznájar, porque es allí donde está el edificio municipal donde lo realizamos, aunque lo pagamos entre los dos ayuntamientos", explica Castellano.

Por la parte de Iznájar los alcaldables son Isabel Lobato (PSOE), Cipriano Galeote (PP) y Eva María Pacheco (PA). Por la de Loja, Miguel Castellano (PSOE), Leocadia Ruiz (PP) y Antonio Ramón Molina (CpL). La mayoría de los ventorreños dice no conocer a los candidatos de la otra parte. "Si no fuera por las fotos de los carteles que hay pegados no los conoceríamos", asegura la lojeña Ángeles a las puertas del colegio de la pedanía, en territorio cordobés. Aunque conocen más a los candidatos socialistas, ya que los dos son los actuales alcaldes.

Los partidos políticos pegan sus carteles en la parte del pueblo de la que son sus votantes, sin pasar la frontera establecida por la calle Límite. "Lo hacen así cuando cualquier vecino puede transitar libremente por todo el pueblo", indica el lojeño Ramón. Aunque si se echa un vistazo, se puede apreciar que hay pocos carteles. "No hay espacio para ponerlos. Y tampoco nos gusta ocupar espacios privados para colocar carteles", dice el candidato popular de Iznájar, Cipriano Galeote, del que no hay ningún cartel en toda la pedanía.

En ambas partes existe la figura del alcalde pedáneo, la persona que representa a los vecinos en el ayuntamiento al que pertenecen. Los de la Balerma iznajeña lo eligen mediante otras elecciones democráticas, algo que no pueden hacer los lojeños ya que hace cuatro años el Ayuntamiento de Loja suprimió estas votaciones.

Sergio está en contra de esta decisión y pide que se restablezcan las elecciones a alcalde pedáneo: "Si el alcalde pedáneo es elegido por el pueblo es porque tiene mayor simpatía con sus votantes y, por tanto, atiende mejor a sus demandas que un alcalde impuesto", explica. Durante este mandato que ahora acaba, los dos alcaldes pedáneos han sido de diferente signo político. El de Iznájar ha sido del PP y el de Loja, del PSOE.