Manuel Fernández Molina 'Parrilla de Jerez' (1945-2009) forma parte de la historia de la guitarra jerezana. Su peculiar estilo, basado en la pureza, ha creado escuela y hoy por hoy sus falsetas aún siguen sonando entre muchos tocaores actuales. Fue Manuel una persona inquieta, y al contrario que otros de su generación, desarrolló su faceta compositora en otros campos, no en vano a él le debemos el trabajo de adaptación de la mítica 'Así canta nuestra tierra en Navidad', así como marchas procesionales y misas flamencas.

Recuerda el guitarrista en una entrevista realizada por Juan de la Plata en Diario de Jerez allá por el año 84, que recibió su primera lección de guitarra "un 9 de abril de 1958, siendo yo un niño". Su maestro, como el de muchos otros de su época, el añorado Rafael del Águila "que tenía toda la escuela guitarrística de Javier Molina".

El de San Miguel "solía coger una guitarra que tenía mi padre colgada de la pared y cuando mi padre vio que tenía posibilidades me mandó con una carta a la casa de su amigo Rafael del Águila, que sería mi único maestro y que nunca me guiso cobrar una sola peseta", relata.

Miembro numerario del Consejo Asesor de la Cátedra y caballero de la Orden Jonda, Parrilla se reconocía admirador de "Manolo de Huelva, un fenómeno de su tiempo, Melchor de Marchena, genial, Niño Ricardo, gran conocedor, Sabicas, uno de los primeros que llevó la guitarra a lo máximo en el plano del concierto, y Manolo Sanlúcar, un músico excelente".

Con una trayectoria extensa y tras acompañar a los grandes del cante, Manuel definía, por ejemplo, a Mairena como "un gran maestro, algo así como la enciclopedia". De Caracol comentaba que "era distinto, tenía algo grande en su voz, pues sin ser tan ortodoxo, cuando abría la boca había que decirle ole. Incluso por soleá y seguiriyas, que no eran los cantes que mejor se le daban".

Años más tarde (septiembre de 2004), en una entrevista en este mismo diario realizada por David Fernández, Parrilla defendía el cante de Jerez donde " se canta de una manera especial y distinta". Para ello se refería al estilo propio, no en vano "los creadores más grandes de la historia han sido jerezanos, tanto en el cante gitano, con Manuel Torre, como en el payo, con Chacón. Y podríamos seguir, Mojama, La Malena, La Macarrona...".

Parrilla recordaba con nostalgia la pérdida de La Paquera "una artista muy grande", y asumía que "ya no hay genios de su clase o como Terremoto".