La actividad constructiva residencial continúa en crecimiento en Jerez. Desde que comenzara el año y hasta finales del pasado mes, el Ayuntamiento ha dado permiso para la construcción de unas 290 viviendas. Esta es la estimación realizada por este periódico teniendo en cuenta las autorizaciones aprobadas por el ejecutivo municipal en las juntas de gobierno local celebradas hasta ahora.

La cifra dobla a la registrada en el mismo periodo del año anterior. Eso sí, hay que tener en cuenta que en el inicio de la pandemia del coronavirus se decretó un primer estado de alarma que, entre otras medidas, determinó la suspensión de todos los procedimientos administrativos. Pero, a pesar de la crisis de la covid-19, el Ayuntamiento autorizó el pasado año en torno a 400 viviendas, el mejor dato que se había registrado desde 2010. Por lo tanto, si continúa la tónica en este último cuatrimestre, es más que probable que se puedan superar estos registros corroborando así la recuperación de una actividad clave en la economía local.

Ahora bien, hay dos enclaves de la ciudad que en los últimos años está teniendo una mayor crecimiento. Es el caso del entorno de la avenida Caballero Bonald y de la zona residencial de El Carrascal a tenor del número de permisos concedidos en estos enclaves. No en vano, aproximadamente un tercio de las viviendas autorizadas por el Ayuntamiento en este año se prevén en estas zonas.

La manzana conformada por la avenida de Europa, la Caballero Bonald y San José Obrero (Arroyo del Membrillar) es uno de los enclaves con mayor nivel de desarrollo de los últimos años. En este año, en este enclave la Delegación de Urbanismo ha autorizado dos promociones, una de 55 viviendas en la calle Santa Josefina y otra de 20 en Pintor Francisco Mariscal Serrano. Y a mediados de 2020 autorizó otra de 44 viviendas. Esta intensa actividad es consecuencia de las figuras urbanísticas que se han ido tramitando desde 2014 para permitir su desarrollo. Así, en los últimos siete años se han aprobado seis estudios de detalle (el último el pasado mes de abril). 

Mientras, en El Carrascal, hasta finales de agosto Urbanismo había concedido licencia para otras tres promociones con un total de 26 viviendas. A ello se une que a primeros de marzo se aprobó la parcelación de otra de las manzanas de este enclave ubicado junto a las antiguas bodegas de Croft y que está teniendo un importante desarrollo en los últimos años. Mientras, el pasado año se dio vía libre a otras 26 viviendas. La puesta en carga de los suelos urbanizables de esta zona residencial pudo retomarse tras la firma de un nuevo convenio urbanístico en 2017 con los nuevos propietarios que permitió desbloquear la conclusión de la urbanización de la zona.  

Ahora bien, la promoción con el mayor número de viviendas con permiso municipal concedida por la Delegación de Urbanismo en este 2021 corresponde a un edificio que ya se está construyendo en el Paseo de las Delicias junto a las dependencias de la Guardia Civil. En los terrenos que albergaron la antigua sede de la empresa De Luque se están edificando 60 viviendas.

Asimismo, tras varios años de parón, se ha retomado el desarrollo de una de las parcelas residenciales pendientes del entorno de Sherry Golf, en la zona sur de la ciudad, con una primera fase de 12 viviendas que ya tienen el beneplácito del Ayuntamiento. Esta promoción es la primera tanda de un total de 52 viviendas, según los datos obrantes en las actas de la junta de gobierno local.

Por otro lado, en el centro de la ciudad se han concedido nueve licencias para la construcción de un total de 52 viviendas. Así, se han autorizado obras en la calle Pedro Alonso (13 viviendas), Santa María (11), Barja (8) o Peones (9), entre otras.

De este modo, se consolida la recuperación en el sector que, a pesar de la crisis económica provocada por la pandemia, no ha visto ralentizado su crecimiento tras sufrir una hecatombe en 2008. No en vano, las aproximadamente 400 viviendas que se autorizaron el pasado año fue el mejor dato desde 2010, donde se dieron permiso a la construcción de 497 inmuebles.

Fue entre 2004 y 2005 cuando la Delegación de Urbanismo concedió más licencias. En 2004, por ejemplo, se firmaron 4.145 autorizaciones y en 2005, la friolera de 5.762. Lo que ocurrió después ya es conocido: la burbuja inmobiliaria estalló y la mayoría de las empresas del sector acabaron en la quiebra con un ‘stock’ de suelo y viviendas en sus activos que acabó la mayor parte en los balances de las entidades bancarias que poco a poco, con mucha dificultad y la llegada de nuevos actores, el mercado ha empezado a digerir.

Especialistas del sector han reiterado desde hace unos que esta actividad está viviendo en la actualidad un crecimiento sostenido y alejado de la fiebre del ladrillo de la primera década de este siglo. Y muestra de esa recuperación son también los datos de compraventas de viviendas que se publican periódicamente por parte de administraciones públicas como el Ministerio de Transportes o de instituciones como el Consejo General del Notariado. Este último reflejaba que en el primer trimestre del año se habían realizado 637 compraventas de viviendas, de las que un 83% eran de renta libre, el mejor arranque en años.