Cien proyectos de desarrollo por el progreso en las zonas rurales de Perú

La ONG para el Desarrollo Madre Coraje ha concluido en este año 2010 el proyecto de desarrollo número 100 en su trayectoria de trabajo en Latinoamérica. Con estos 100 proyectos, Madre Coraje ha apostado por mejorar de forma autónoma y sostenible las condiciones de vida de 250.000 personas de las poblaciones más empobrecidas de Latinoamérica, partiendo de sus propias necesidades y de sus propios recursos.

La mayoría de los proyectos, centrados en el desarrollo rural y en la educación, se han realizado en las regiones más empobrecidas del Perú. En concreto, Huancavelica, Apurimac y Ayacucho, beneficiando a las comunidades campesinas de los Andes peruanos. Coincidiendo con el acontecimiento y con el fin de acercar la realidad de estas zonas andinas donde Madre Coraje actúa, esta semana aterrizaron en España Félix Rojas Orellana, Karina Bueno Dueñas y Fortunata Carbajal Matamoros, naturales de Ayacucho, Apurimac y Huancavelica respectivamente.

Karina Bueno, responsable del Área de Mujer del Centro de Desarrollo Humano CDH, socio local de Madre Coraje desde hace más de cinco años, destacó en su intervención los tres proyectos con los que se han beneficiado. "Promover la reconstrucción del tejido social y trabajar con la comunidad campesina, afectados por la violencia política que sufrió este país hasta el año 2000, son algunos de los objetivos de estos proyectos". Por su parte, Karina Bueno reconoció que "el panorama ha cambiado bastante. Ahora contamos con unas 30 organizaciones totalmente establecidas que trabajan para promover la participación de las personas excluidas en espacios de decisión. Y todos estos cambios han sido posibles gracias a Madre Coraje".

Por su parte, Fortunata Carbajal, presidenta de la Asociación de Mujeres Campesinas de Paucará, en Huencavelica, durante el acto de ayer subrayó la labor que Madre Coraje a llevado a cabo en Perú; "gracias a estos proyectos muchas mujeres hemos conocido nuestros derechos y deberes. Ahora valoramos más lo que somos y poco a poco nos vamos librando del machismo. Por fin somos libres, podemos opinar y participar. Las mujeres nos vamos liberando, y vamos avanzando un poco más. Yo antes de entrar en la asociación me dedicaba sólo a cultivar patatas en el campo y a las tareas de la casa".

Fue en el pasado mes de febrero cuando Madre Coraje concluyó su proyecto de desarrollo número 100. Han pasado 16 años desde que en 1994 se apoyara un primer proyecto de abastecimiento de aguas en un remoto poblado del norte del Perú. Con este proyecto se abrió así una nueva línea de trabajo que se añadía a la que desde 1991 se llevaba de ayuda humanitaria. Así, Madre Coraje apostaba por mejorar de forma autónoma y sostenible las condiciones de vida de poblaciones empobrecidas de Latinoamérica, partiendo de sus propias necesidades y de sus propios recursos.

Para la ejecución de estos 100 proyectos se han invertido cerca de doce millones de euros, procedentes en su mayoría de entidades públicas y de los que Madre Coraje ha aportado de fondos propios un 10,8% gracias a sus socios y el trabajo voluntario de sus miembros a través del reciclaje.

El acto también contó con la presencia de Joaquín Rivas, director de la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional para el Desarrollo; Carlos Perales, director del Área de Ciudadanía de la Diputación de Cádiz y Félix Rojas, director ejecutivo de la ONG Centro de Desarrollo Andino 'Sisay', que ofreció datos con los que explicó que el 80 por ciento de la población tiene las necesidades básicas insatisfechas. "Dentro de esta pobreza nos interesa el desarrollo de las capacidades de mujeres y jóvenes, es importante que nos centremos en su formación y educación", afirmó Félix Rojas.

Por su parte, la alcaldesa Pilar Sánchez anunció que no cesará en su empeño de ofrecer ayudas a Madre Coraje y a encontrar una entidad bancaria que financie la construcción de sus nuevas instalaciones proyectadas en la parcela que ha cedido el Ayuntamiento y concluyó que "ejercer el voluntariado en esta ONG da prestigio, porque Madre Coraje ha ofrecido en estos años una credibilidad impecable".

Para concluir, Antonio Gómez, presidente de Madre Coraje destacó que "lo que nos diferencia de otras ONGs es la idea de la fraternidad, tratamos a todos como hermanos. Además, aunque hayamos llegado a los 100 proyectos vamos a seguir luchando por cooperar con este país que necesita tantísima ayuda".