En orden a su antigüedad, de las entidades culturales existentes actualmente en Jerez la segunda es: La Real Academia de San Dionisio de Ciencias, Artes y Letras. La misma fue inaugurada el día 12 de octubre de 1947, teniendo como sede social el edificio de la antigua Pescadería Vieja, cedido al efecto aquel mismo año por el Ayuntamiento de Jerez, quien a la vez concede una pequeña ayuda económica. Su primer presidente fue Ángel Rodríguez-Pascual y Vega, democristiano y sin participación política conocida, hombre moderado que hará de su talante personal una pieza de equilibrio en esta primera andadura. Su etapa 1947-1953 (fecha de su fallecimiento) será una etapa de consolidación.

Pocos años después de ser instaurados los Ayuntamientos de nuestra actual Democracia, el alcalde de Jerez, Pedro Pacheco, pretendió desalojar a la Academia de su sede, basándose en que si bien su cesión fue aprobada por la Comisión en 1948, este acuerdo no llegó nunca a ser ratificado en el Pleno. Esta situación llegó a crear un clima de deterioro en las relaciones entre la Academia y el Ayuntamiento. En 1984 es elegido presidente de la Academia el Dr. Francisco Fernández García Figueras, el cual será uno de los más fervientes valedores de la integración de la Academia en entonces recién creado Instituto de las Reales Academias de Andalucía, a cuyo Pleno pertenece la jerezana desde 1985. Son entonces aprobados unos nuevos estatutos, acomodados a la situación democrática, en los que entre otras cosas se declara la Academia aconfesional, pero siempre tratando de conservar la tradición de su procedencia histórica. En 1990, por fin se logra un acuerdo con el Ayuntamiento para la cesión por 75 años de un local en construcción junto al Salón Municipal de Plenos, acometiéndose a continuación las obras de la sede actual con la ayuda económica de diversas empresas privadas y entidades bancarias

Sus sesiones semanales, sus cursos académicos y sus ciclos científicos e históricos la han consolidado a lo largo de todos estos años, siendo actualmente una referencia en la vida cultural de Jerez. La Real Academia de San Dionisio es miembro de número del Instituto de las Reales Academias de Andalucía y, por ende, del de las Reales Academia de España. En 1991 S.M. el Rey le concedió el título de Real y, por tanto, el tratamiento de Ilustrísimos a sus miembros numerarios y el de Excelentísimo a su presidente. En 1994 el Instituto de Reales Academias de Andalucía celebró su "Día Institucional" en esta Real Academia de San Dionisio, dando así su respaldo a una labor densa e ininterrumpida.

Asociaciones musicales

La primera asociación musical estable de las que tenemos noticias en Jerez fue la "Sociedad Artística Musical", fundada en 1914 y establecida en la calle Cerro Fuerte. En 1927 se crea la Sociedad de Arte "La Armónica", se trataba de una agrupación musical con orfeón y coro infantil que llegó a dar conciertos en Villamarta. A principios de la década de los cincuenta nacen en Jerez varias e importantes agrupaciones musicales, las cuales llegaron a tener un gran prestigio y cosecharon destacados éxitos tanto dentro como fuera de la ciudad. Se trataban de la "Schola Cantorum Carmelitana", la Orquesta Juvenil de Santa Cecilia y la Orquesta de Cámara de Jerez, todas ellas auspiciadas y dirigidas por el genial violinista José Martínez Carmén. Pero sin duda la más importante de estas agrupaciones musicales fue la Orquesta Sinfónica y el Orfeón Jerezano. Un grupo compuesto por sesenta y cinco profesores músicos, cuarenta y cinco voces masculinas y otras tantas femeninas con la gran soprano Amparo Landa como solista, dirigidos por el inolvidable maestro Moisés Davia. Inolvidables fueron, entre otros muchos conciertos que ofrecieron, aquellos Misereres interpretados en vísperas de Semana Santa en el Teatro Villamarta que el maestro Hilarión Eslava compusiera para Jerez. Sin duda una Orquesta Sinfónica y un Orfeón dignos de nuestra ciudad que nunca se debió perder. Tras su desaparición, un grupo de sus componentes dirigidos por el maestro Orellana formaron la Coral Filarmonía que durante dos décadas más siguieron ofreciendo magníficos recitales.

Cine, fotografía y teatro

Con la llegada de los primeros años de la transición y, al amparo de las nuevas leyes asociativas, son numerosos los grupos culturales que entran en la escena cultural jerezana, Grupos de teatro como el de Radio Popular encabezado por Pepe Marín, el Cuadro Artístico Antonio Vico, La Gotera de la Azotea o la Zaranda. También, en cuanto al Flamenco, son diversas las peñas que nacen en esta época como la de Tío José de Paula, La Bulería, El Garbanzo, El Mono o los Cernícalos, esta última decana de las establecidas en Jerez, trabajaron con ardor en la defensa y conservación de ese gran patrimonio cultural de nuestra tierra como es el cante y baile flamencos. Peñas taurinas como la de Juan Antonio Romero en la calle Bizcocheros, la de Rafael de Paula en el Chicle, o Los Trece, colaboraron a enriquecer el panorama cultural y asociativo de la ciudad.

En cuanto al mundo de la imagen, en 1976 al amparo de las nuevas leyes asociativas, el recordado ginecólogo Servando Estrade Camúñez funda la denominada "Agrupación Cine-fotográfica Jerezana de San Dionisio". Entidad que desde el primer momento acoge en su seno a lo más granado del arte fotográfico de la ciudad tanto amateur como profesional. Conoció varias sedes, pues de la primitiva de Pescadería Vieja se trasladó a la Escuela de San José, de allí a la calle Ancha y luego a la de Caldereros. Actualmente ocupa la Torre del Agua en la barriada de la Plata. Dicha agrupación lleva organizando desde su fundación numerosas exposiciones individuales y colectivas, concursos permanentes y concursos nacionales, impartiendo además numerosos cursos de fotografía. Muchos de sus miembros han sido galardonados con importantes premios de ámbito nacional e internacional. También en la década de los 80 organizaba en colaboración con el Cine-club Popular la "Muestra Nacional e Cine Amateur de Jerez". Dicha muestra contó con la participación, presencia y exhibición de obras de los más destacados autores españoles en este género cinematográfico.

Con respecto al Cine Club Popular antes citado, diremos que llegó a ser en Jerez uno de los movimientos culturales más relevantes de la transición. Fundado en 1976 gracias a una iniciativa encabezada por Francisco Javier Izquierdo, que por aquel entonces realizaba un programa sobre cine en Radio Popular y además aportaba la experiencia de su participación en la década anterior en el Cine Club Juvenil Kosca con sede en el convento de la Compañía de Jesús. El Cine Club Popular se estableció en un local de la calle Caracuel comenzando a realizar ciclos de "Cine estudio" con numerosas películas que hasta entonces no se habían podido ver en el cine comercial. Luego realizaron campañas de difusión del cine entre los escolares, así como exposiciones y conferencias. Fue en 1990 cuando el Cine-club jerezano alcanzó su máximo número de socios y su más alta cota de actividad. En ello influyó quizás la más portante de sus actividades como fue la "Muestra de Cine Internacional" con la que se consolidó y llegó a ser considerada como una de las entidades más destacadas de toda España en su género. En 1984 este Club creó un fondo documental y audiovisual que llegó a contar con más de tres mil volúmenes, los cuales se encuentran actualmente depositados en la Biblioteca Central Municipal.

El renacer de las tertulias

En las dos últimas décadas del pasado siglo, renace con fuerza un fenómeno que parecía olvidado en el panorama cultural de Jerez. Nos referimos a las tertulias literarias o cultas. La primera de ella nace en 1983 encabezada por el popular peluquero Pepe Castaño, denominada simplemente como "La Tertulia". Posteriormente aparecen otras como "Noches Xerezanas" iniciada en 1986 y coordinada por quien esto escribe. "De ocho y media nueve" encabezada por el arquitecto Manolo Collado; "La Alameda" que tenía como alma mater a Marisa Páez. "La Moderna" con el escritor Paco Bejarano. "El Volapié" creada por Marcelino Laínez en un reservado del popular establecimiento del mismo nombre. Y la denominada "Rincón Malillo" con sede en el Casino Nacional. Esta última junto con la de Pepe Castaño son las únicas que perviven en el tiempo, ambas ya con más de treinta años de antigüedad. Todas fueron magníficos foros de debate y transmisión de conocimientos.