El río Guadalete sufrió a partir de la noche del sábado una nueva crecida por las aportaciones de los dos arroyos Salado, que han bajado muy cargados de agua durante los últimos días. Alcanzó la cota de 5,90 metros, que se mantuvo por la mañana. La subida de nivel era perceptible en la carretera de La Ina o Las Pachecas, aunque la cota de agua, a simple vista, no alcanzó la registrada durante las pasadas riadas.

Fuentes del Plan de Emergencias Municipal (PEM) y de la Policía Local, que vigila constantemente Las Pachecas, indicaron que ayer no se produjo ningún desalojo de personas ni anegación de viviendas. Los vecinos del segundo núcleo, hartos de agua, explican que “ha subido bastante pero por la tarde ha bajado”, aunque su interés era ayer ver el partido del Xerez. “De agua estamos hartos. Para qué hablar”, agrega otro, pues hay vecinos que están desalojados desde las pasadas Navidades.

El PEM destacó que el nivel de las aguas estuvo “fluctuando toda la jornada”. Así, a las 20:00 horas aproximadamente, la última cota registrada fue de 5,64 metros. No espera que este nivel crezca pues las predicciones meteorológicas son buenas para hoy por lo que no se ha decretado ninguna ‘alerta amarilla’ por la Aemet (Agencia Estatal de Meteorología).

El temporal mantiene cortadas hasta seis carreteras de la red secundaria como son la CA-4107, la CA-3102, la CA-3113, la CA-4102, la CA-3110 y la CA-3109, indicó la Dirección General de Tráfico (DGT). El aguacero no ha provocado accidentes con daños personales graves. La última carretera citada, curiosamente, está cortada en su inicio junto a la fábrica de cemento con dirección Yeguada del Hierro del Bocado pero sí está transitable en El Portal con dirección Bolaños. También ayer las autoridades mejoraron la señalización de las carreteras cortadas de la red secundaria con elementos más visibles y la colocación de avisos en puntos, como en La Corta, donde el sábado se produjo una gran acumulación de agua en sentido de circulación El Portal. La bolsa desapareció ayer.

El fin de la ‘alerta amarilla’, ya las 15:00 horas del pasado sábado, aunque haya provocado el aumento del caudal del río y más anegaciones en campos, produjo un evidente descenso del número de intervenciones de los bomberos y resto de fuerzas de seguridad. Los bomberos apenas tuvieron dos ayer en el casco urbano y por motivos leves. A última hora del sábado fueron requeridos ya que un vehículo había quedado apresado por el agua en la carretera de La Ina. Pero cuando los efectivos del 085 pudieron acudir los tres ocupantes del coche habían salido antes por su propio pie. La Guardia Civil ha estado denunciando a los conductores que se adentran por carreteras cortadas pero muchos lo siguen haciendo y más si disponen de vehículos todoterreno.

Un camionero, que vive casi bajo el puente de la A-381, en el inicio de la carretera de La Ina, dice que “pasamos una mala noche el sábado pero hoy ha escampado un poco, aunque haya subido el río. Uno ya se acostumbra”, mientras otras personas siguen practicando el turismo ‘catastrófico’ y se fotografían con el mar de agua de Los Llanos de La Ina y de Las Pachecas.

Hoy no hay previsión de que se produzcan lluvias fuertes, pero pueden repetirse los chubascos como cayeron ayer en cortos intervalos. La Agencia Andaluza del Agua (AAA) señaló que el pantano de Arcos mantiene un desembalse de seguridad a razón de 69 metros cúbicos por segundo mientras que Guadalcacín, que ya supera el 87% de su capacidad, sigue aliviando menos de un metro cúbico. Como está dicho, la Aemet no prevé ninguna alarma especial para hoy, en que la probabilidad de lluvia es de un 80%, mientras para mañana se reduce a un 35%.