Las últimas inundaciones en Sanlúcar no han estado exentas de polémica. El Gobierno local del PSOE quiso ayer dejar claro que "las importantes obras de infraestructuras acometidas a lo largo de 2010 y 2011 en la ciudad han evitado que los problemas por las fuertes lluvias en determinados puntos del municipio hayan sido mayores".

"Los problemas de inundaciones son consecuencia de la intensidad y la duración de la lluvia: más de 40 litros en media hora. Ninguna red de saneamiento tiene capacidad para absorber esa cantidad de agua. La prueba es que en el momento en que dejó de llover, el agua de las calles se evacuó rápidamente y con normalidad", aseguró.

Según el equipo socialista, "para evitar que las fuertes lluvias provoquen estas situaciones, el Ayuntamiento dedicó inversiones millonarias del Plan E del Gobierno para mejorar el aliviadero del Callejón de Guía, las redes de saneamiento de la Avenida de San Francisco, la calle Ganado y La Calzada de la Infanta, y la Avenida de Huelva, entre otras, además de la construcción del tanque de tormentas". "Ninguna de estas obras contó en su momento con el apoyo de los grupos de IU y PP, partidos que aprovechan las circunstancias actuales para hacer demagogia", apostilló.

IU reclamó al Gobierno local que explique "cuáles son las soluciones que plantea para poner fin a las inundaciones". "¿Para qué ha servido el estudio técnico encargado por la Gerencia Municipal de Urbanismo a una empresa externa por más de 18.000 euros para evitar las inundaciones?", preguntó públicamente esta formación política.

A su juicio, "la única causa de las inundaciones es que Sanlúcar dispone de una calamitosa red de saneamiento que los sucesivos gobiernos del PP y el PSOE no han querido mejorar, como tampoco Aqualia, a pesar de la millonada que se lleva".

Por su parte, la plataforma ciudadana Agua Clara criticó que en los últimos cinco años se han producido ocho inundaciones en el municipio. "Sanlúcar tiene un serio problema de canalización de aguas", aseguró este colectivo, que exigió al alcalde, Víctor Mora, que "dé la cara" ante "este desastre convertido en cotidiano".