Salud y Bienestar

Así es el mewing, los ejercicios que evitan cirugías y triunfan entre las famosas

Harry Styles, uno de los famosos que practica el mewing, durante un concierto

Harry Styles, uno de los famosos que practica el mewing, durante un concierto

¿Es posible cambiar la forma de la cara y tener una mandíbula más marcada simplemente colocando la lengua de una forma determinada? Esto es lo que promete la nueva técnica de moda en redes sociales: el mewing. 

Mewing, ¿técnica de moda, mito o realidad?

El mewing consiste en unos ejercicios posturales en los que ha de colocarse la lengua en una posición determinada, apoyada en el paladar y sin bloquear las vías aéreas, mientras se mantienen los dientes y los labios cerrados con suavidad. Esto obliga a la persona a respirar por la nariz y según los defensores de este método, a lo largo cambiará los huesos de la mandíbula, consiguiendo que esté más marcada, llegando incluso a modificar el puente de la nariz. Este método cuenta con adeptos como Harry Styles, Meghan Markle o Tom Cruise y también ha llegado al público general a través de redes sociales, ya que este método no solo se usa para tener una mandíbula marcada, sino que también promete ser el ejercicio con el que eliminar definitivamente la papada y corregir la posición de la mandíbula y los dientes, evitando así tener que pasar por el quirófano. 

El mewing nació en la década de 1970, de la mano del ortodoncista británico John Mew, que desarrolló una serie de ejercicios para entrenar la postura oral. Sin embargo, su popularidad ha explotado en los últimos años, en parte gracias a Mike Mew, hijo de John, y la difusión que ha realizado de estas técnicas a través de las redes sociales. Sin embargo, ya que el mewing no cuenta con ninguna evidencia científica, Mew hijo fue expulsado de la Sociedad de la Ortodoncia Británica por divulgar su método.

Pero más allá de sus promesas y de las múltiples imágenes de supuestos antes y después, el mewing también tiene detractores por los riesgos que conlleva y los mitos que transmite. Desde la American Association of Orthodontists señalan que la estructura facial depende de "una compleja interacción de genética, el crecimiento de los huesos y del desarrollo muscular" y simplemente "cambiar la posición de la lengua no es suficiente para corregir los dientes desalineados como por arte de magia, cambiar la forma de la mandíbula y evitar necesitar un tratamiento con ortodoncia".

Además, al necesitar que los dientes estén en contacto para realizar los ejercicios de mewing, usar esta técnica en exceso puede incluso llegar a desgastarlos, entre otros problemas, como alteraciones en la articulación temporomandibular y dolores en los músculos faciales, como señalaba el doctor Renato Gunckel, cirujano maxilofacial, al medio BioBioChile.

Tags

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios