La inflamación corporal suele relacionarse con problemas de peso y obesidad, pero no siempre es así. Se suele tener una percepción negativa de este concepto cuando en realidad se trata de un aumento de sangre y líquidos en una determinada zona del cuerpo para que las células lleguen al lugar donde tienen que llegar. 

Cuando nos damos un golpe, se hincha la zona dañada por un tiempo. Esto es algo normal. La inflamación que debe preocuparte es la que está permanentemente en tu organismo ya que tiene consecuencias negativas, entre las que se encuentra, la dificultad para perder peso. La inflamación es una respuesta del sistema inmune cuando algo anda mal y no tiene por qué estar asociada a la gordura ya que, al ser un problema del propio organismo, puede pasarle tanto a una persona que esté delgada como a una que esté gorda.

Dieta antiinflamatoria

La mala alimentación influye en la inflamación crónica y esto puede ser problema de cualquier persona. Aunque las circunstancias de la inflamación pueden ser variadas, el primer paso para combatirla es cambiando tus hábitos de comida. Hay unos alimentos que ayudan más que otros a que el cuerpo esté inflamado, sobre todo la zona del abdomen, pero también hay otros que aportan mucho alivio interno, favoreciendo el desarrollo de una digestión más saludable.

1. Jengibre: El jengibre es conocido por sus propiedades antiinflamatorias y digestivas. Puede ayudar a aliviar la inflamación del estómago y mejorar la circulación sanguínea en el área abdominal. Hay opciones de consumo en forma de té, en batidos incluirlo en algunos platos cocidos.

2. Papaya: La papaya contiene una enzima llamada papaína, que facilita la digestión de las proteínas y reduce la inflamación. Además, es rica en fibra, lo que ayuda a mantener un sistema digestivo saludable y puedes disfrutarla fresca o añadirla a ensaladas y postres.

3. Yogur probiótico: Los yogures con cultivos probióticos son excelentes para la salud intestinal ya que estos microorganismos beneficiosos ayudan a equilibrar la flora intestinal, reduciendo la hinchazón y mejorando la digestión. Los yogures naturales sin azúcares añadidos ayuda a obtener mejor los beneficios, pero es algo opcional.

4. Pepino: El pepino es conocido por su alto contenido de agua y su capacidad para ayudar en la hidratación, pero además tiene sustancias antiinflamatorias que ayudan a reducir la hinchazón abdominal. 

5. Avena: La avena es rica en fibra soluble y ayuda a regular el tránsito intestinal y a prevenir la hinchazón. Además, proporciona una sensación de saciedad duradera, lo que puede ayudar a controlar el apetito.

6. Menta: La menta ayuda a relajar la musculatura gastrointestinal, reduciendo la sensación de hinchazón gracias a sus propiedades calmantes para el sistema digestivo.

7. Piña: La piña contiene bromelina, una enzima que ayuda a descomponer las proteínas y facilita la digestión, añadido a su contenido de fibra hacen una buena combinación para mantener un sistema digestivo saludable. Añade piña a tus batidos, ensaladas o cómela como un tentenpié refrescante.

8. Infusiones de Hierbas: Tés de hierbas como el té de manzanilla, hinojo o anís son grandes aliados para aliviar la hinchazón abdominal. Todo ello gracias a que contienen propiedades relajantes para los músculos del tracto gastrointestinal, promoviendo una digestión más eficiente.