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Nuestra Señora del Mayor Dolor fue llevada en la tarde noche de este viernes desde la Parroquia de San Dionisio hasta la Real Capilla del Calvario. Este traslado está motivado por la celebración de la Magna Mariana ya que, al iniciarse la carrera oficial en la plaza de la Asunción, donde se instalarán palcos y sillas, su salida desde su sede canónica era dificultosa a efectos de seguridad, de ahí que haya optado por salir del templo de la calle Taxdirt junto a su cofradía hermana de La Piedad.
Para este traslado, la Virgen fue portada en una parihuela donde se había instalado un palio de ocho varales con sus antiguas caídas, con bordados en oro sobre tisú de color oro, que datan de principios de este siglo, una reliquia que aún conserva la corporación del Jueves Santo y que mostró de forma excepcional. El techo de palio era una reproducción del antiguo, que era una pintura de Germán Álvarez Algeciras, realizada en 1898, que puede verse en San Dionisio.
Junto con la antigua candelería, que llevó el pequeño paso, y las ropas de los acólitos, hizo que fueran muchos los detalles que rememoraban la estética cofradiera de hace un siglo. La dolorosa iba vestida con una saya granate, de estilo rocalla. El manto que llevaba fue realizado en 1891.
La hermandad regaló así una estampa inusual, bella e histórica de su dolorosa en los prólogos del magno acontecimiento.
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