Viendo la racha de uno y otro, el de hoy se presenta como uno de esos encuentros que nadie se quiere perder. Televisión de por medio, gran momento de forma, en fin, un partido para seguir muy de cerca y para no levantarse del sillón.

Los locales llegan radiantes de confianza tras vencer a domicilio al Sevilla Atlético, demostrando una vez más que funcionan como un bloque y que a balón parado son un equipo bastante difícil de defender. Los visitantes, en cambio, aterrizan en tierras valencianas con un arma de doble filo en la manga. La victoria del domingo le ha otorgado una enorme dosis de moral, sin embargo, partidos como el del último fin de semana difícilmente se puedan volver a repetir, por lo que deberán corregir los errores puntuales que la pasada jornada le hizo encajar tres goles.

No obstante, lo que se prevé como un espectáculo entre dos buenos equipos, puede estropearlo un invitado de excepción, el mal estado del césped del Rico Pérez. El terreno de juego lleva ya varias jornadas en malas condiciones, un hándicap que puede perjudicar a ambos contendientes, ya que los dos equipos son amantes del buen trato de balón y sobre todo de gozar de largas posesiones de balón.

En los azulinos, Esteban ha vuelto a repescar a Vicente Moreno, una vez cumplido su partido de sanción. La duda estará ahora, porque todos dan por hecho el regreso del ex capitán al centro del campo, quién será el sacrificado, si el técnico apostará nuevamente por Álex Bergantiños o por el contrario dejará en el banquillo al de siempre lejos de Chapín, el sevillano Antoñito. Conociendo a Boquerón y viendo su trayectoria esta temporada lejos de Jerez, lo más normal es que el malagueño adelante la posición de Emilio Viqueira y sitúe al pivote Moreno-Bergantiños para frenar al poderoso mediocentro del Hércules, con Farinós y Rodri.

El resto del equipo, al menos tras la exhibición de la semana pasada, variará poco, y lo lógico es que Chema siga bajo los palos, con Francis, Aythami, Martí Crespí y Mendoza en defensa; Vicente Moreno, Viqueira y Álex Bergantiños o Antoñito en el centro del campo, Pedro Ríos por la derecha, Momo por la izquierda y el cántabro Mario Bermejo como punta de lanza.

La convocatoria en sí la conforman Chema y Porato como porteros; Mendoza, Portela, Crespí, Silva, Francis y Aythami como defensas; Álex Bergantiños, Moreno, Viqueira, Carlos Calvo, Pedro Ríos, Momo y Brian Sarmiento como centrocampistas y Mario Bermejo, Antonio Calle y Antoñito como delanteros. Con respecto al último partido se queda fuera de la convocatoria Asier Arranz, mientras que continúan sin entrar Jorge Luque, Redondo, Rabiu, Álex Colorado y el brasileño Amaral, amén del lesionado Míchel.

El equipo azulino tiene ante sí una nueva oportunidad para mejorar su balance a domicilio, donde solamente ha ganado un partido, precisamente el primero de Liga en este mismo campo, aunque ante el Alicante.

En el Hércules, por su parte, Juan Carlos Mandiá recupera a Fernando Sales tras varias semanas en el dique seco por un problema muscular. En cambio, ha dejado fuera de la lista a la otra alta de la semana, el también sevillano Dani Bautista, que había estado sancionado. Además, también se perderá el encuentro el ex xerecista Abel Aguilar, al que aún le resta al menos una semana para recuperarse.

Mandiá tiene para este encuentro la duda de Rubén Navarro, que se encuentra 'entre algodones' por culpa de una fuerte tendinitis que le ha impedido entrenar con normalidad durante los últimos días. De hecho, el técnico del cuadro alicantino ha convocado a diecinueve futbolistas. El punta será sometido a una última prueba antes del encuentro y en función de cómo responda estará o no en el banquillo junto al resto de sus compañeros.

Después del último partido, en los locales no se esperan excesivos cambios, toda vez que el equipo venció con solvencia al filial sevillista en la Ciudad Deportiva.

Tote y Delibasic serán los dos jugadores más ofensivos del Hércules, con Sendoa y Tuni en las bandas.