El bloqueo de los derechos federativos del Xerez Deportivo se ha convertido en el culebrón de esta temporada. La entidad azulina llegó sobre la campana el pasado mes de septiembre a un acuerdo con los tres jugadores que tenían presentadas denuncias ante la AFE, José Vega, Toni Lechuga y Manuel Ruz, y finalmente logró que la Española diese el visto a la Andaluza para que el equipo compitiera.

La deuda con los tres futbolistas, según la Española y la AFE, era en su día de 174.677,07 euros, la entidad abonó una parte a los tres jugadores y llegó con ellos a un acuerdo para pagarles cada mes una cantidad. El 5 de septiembre, la Española remite a la Andaluza una resolución en la que le explica que puede tramitar licencias al Xerez, toda vez que "ha quedado acreditado el abono de las cantidades adeudadas a sus jugadores, según comunica la AFE".

El Xerez no cumplió con lo pactado con los jugadores, no les abonó la cantidad estipulada cada vez y Manuel Ruz, a diferencia de José Vega y Toni Lechuga, que optaron por esperar, dio el paso a finales del pasado mes de noviembre de volver a denunciar al club ante la AFE, con lo que automáticamente le fueron bloqueados otra vez los derechos federativos.

La deuda con los tres jugadores es de 84.856,98 euros y esa cantidad es la que le ha impedido reforzarse y le impedirá competir la próxima temporada si no la salda dentro de los plazos establecidos.

La Española, ante la demanda de Ruz, decidió el pasado 29 de diciembre adoptar, como medida cautelar, "no continuar expidiendo ni renovando licencias de futbolistas al Xerez CD, significando además que el impago de la deuda podría suponer la adopción de las medidas que prevé el artículo 104 del Reglamento General de la RFEF".

Esta resolución fue la que impidió al Xerez hacerse con los servicios en diciembre de Nico Carrasco, que después de debutar en el derbi ante el Jerez Industrial anotando un gol y con ficha del Xerez Balompié, tuvo que cambiar de aires porque no tenía licencia con el primer equipo.

José Vega y Toni , que hace unos días cobraron 3.000 euros, han vuelto a retomar el tema de sus denuncias y es evidente que el club, si quiere seguir compitiendo, tendrá que pasar por caja antes del inicio de la próxima campaña.