El Deportes Romero sigue dando rienda suelta al gran momento que atraviesa y ayer venció con merecimiento al Guadalcacín, por lo que lleva cinco jornadas consecutivas sin perder y sólo ha caído derrotado en uno de sus últimos siete partidos. El equipo que entrena José Luis Otero se coloca en quinta posición y cada vez entra en más quinielas para intentar acabar en tercera posición, lugar que le permitiría disputar la eliminatoria de ascenso a Primera Andaluza.

Una gran primera parte le bastó al equipo romerista para poner suficiente tierra de por medio. Cristian Cebada y Costa lo lograron aprovechando el mejor juego local sobre un Guada que sufría para evitar que le cayeran más tantos. Hay que apuntar que la presencia de Martín, el último fichaje del Deportes Romero que debutó ayer, se notó porque ayudó al conjunto capitalino a mejorar una de sus asignaturas pendientes, la veteranía.

Tras el descanso los cambios favorecieron aún más al equipo de Otero, que no bajó la guardia para sentenciar con otro gol de Dani Tejera. Juanchu tuvo en sus botas el cuarto cuando el encuentro estaba visto para sentencia y el jerezano Pepito había perdido los nervios al encararse con parte del público.

El triunfo del Deportes Romero fue merecido y sirve para seguir soñando y haciendo historia, lo que ayer le recompensó el público con una sonora ovación al término del partido.

Al equipo que prepra Paco Ramírez apenas le dio tiempo de asentarse en el terreno de juego y poner en peligro asu controcante gaditano, ya que cuando sólo hab ían transcurrido diez minutos Cristin Cebada iba a marcar el gol que ponía por delante en el marcador al Deportes Romero.

Aunque como es lógico el Club Deportivo Guadalcacín intentó reaccionar metiendo algo de presión sobre su rival lo único que ocurrió fue que a la media hora Costa prácticamente dejase las cosas vistas para sentencia con el segundo tanto local.

Ya tras el descanso al Deportes Romero le bastó mantener el orden en el terreno de juego para mantener como oro en paño su ventaja. Por si las cosas no estaban claras Dani Tejera dejaba las cosas vistas para sentencia, si es que ya no lo estaban.