Los grandes del hemisferio sur, sobre todo la defensora del título, Nueva Zelanda, y Australia, llegan a los cuartos de final del Mundial de rugby tras mostrar su poderío en la fase de grupos, en la que Sudáfrica reaccionó tras perder contra Japón, Inglaterra fue la gran decepción e Irlanda se perfila como la gran esperanza del hemisferio norte.

Los All Blacks, que tratan de revalidar en Inglaterra 2015 su corona mundial, no tuvieron piedad de Argentina, Georgia, Tonga y Namibia y tras cuatro demostraciones se plantaron en los cuartos de final, en los que reeditarán la final del primer torneo Mundial ante Francia (el sábado, a las 21:00) y la del último en 2011. El XV del Gallo no ha despejado las dudas y el futuro, salvo heroicidad, lo ve negro.

Australia, que lucha por ganar un título que no logra desde 1999, dominó en un grupo difícil que significó la eliminación por primera vez en la historia de un anfitrión, en este caso Inglaterra, cuyo paso fue decepcionante. Los Wallabies se las verán con una Escocia (domingo, a las 17:00) que ya ha cumplido, mientras que Gales, que se impuso a Australia en la primera fase, hará lo propio ante una Sudáfrica (el sábado a las 17:00) que ha ido de menos a más tras perder su primer encuentro ante Japón (32-34). Los Springboks se recuperaron con tanta contundencia que vuelven a entrar con letras mayúsculas en las quinielas de favoritos.

Así, Irlanda, que está pendiente de cómo evolucionan los lesionados, se medirá a Argentina (domingo, a las 14:00) como la mayor esperanza de los equipos del norte, si bien no se fía de una selección que acabó la fase de grupos como la máxima realizadora del torneo.