El Sanluqueño quiere seguir soñando. Se juega la segunda eliminatoria copera ante el Alavés y en Vitoria, el más difícil todavía. Juega contra un equipo que hace unos años estaba jugando una final europea contra el Liverpool y que ahora milita en Segunda B, pero que cuenta con un estadio de primer nivel y, lo que es más importante, con una plantilla de plenas garantías para volver a la Liga adelante más pronto que tarde.

Esto, en cualquier caso, no arredrará a los hombres de Pedro Buenventura, que a pesar de no haber estrenado todavía el casillero de los triunfos en la Liga, demostró en Sevilla el domingo que está capacitado para competir con cualquiera a poco que le cambie la suerte en el remate. Por eso viajará hoy mismo hacia Vitoria con la esperanza de dar la sorpresa y eliminar a un histórico.

Y eso, a pesar de que el entrenador sevillano no podrá contar con Óscar Silva, Diego Ramírez ni Portela, lesionados. Con respecto a la última convocatoria entra Lolo por Portela y se queda fuera Juanma.

Buenaventura, como siempre, se muestra cauteloso y respetuoso con el rival, sin que ello sea óbice para mostra su ambición: "Vamos a afrontar la Copa con muchas ganas, sabiendo de nuestras posibilidades ante un equipo muy poderoso. Juegan en su campo y es un rival histórico, pero no vamos en plan de derrotistas; vamos a darlo todo para clasificarnos. Preveo un equipo similar al del Sevilla Atlético. La primera parte que jugamos el domingo es el camino a seguir y la cara que debe tener el Sanluqueño".

No ha confirmado el técnico la alineación de los verdiblancos en Mendizorrozas. Sólo ha asegurado la presencia de Castillo en el lateral derecho, pero no despeja la duda sobre quién será el cancerbero en esta ocasión.

"La Copa es muy bonita, hace mucho que no estamos en ella y veo al equipo motivado y con muchas ganas de pasar. El Alavés ha empezado muy bien en su grupo y será muy complicado, pero sacaremos nuestras armas para intentar pasar".

En el Alavés la temporada ha comenzado de manera inmejorable y después de varios años sin ningún éxito en Segunda B, en este caso el equipo transmite una sensación de solidez que ha ilusionado a la sufrida afición vitoriana. por eso esta tarde habrá con seguridad unos 6.000 espectadores en Mendizorroza, que tiene una capacidad para unos 20.000.

De momento no ha encajado ni un solo tanto el conjunto vitoriano, pero este Sanluqueño se está especializando en romper con la lógica. Mucho que ganar y poco que perder en otra cita que invita a soñar, aunque habrá que ver cómo se adaptan algunos de los jugadores con menos experiencia del conjunto sanluqueño en un escenario de tanto glamour.

Pero eso será una incidencia externa, lo que verdaderamente puede decidir el choque será la calidad y el trabajo de los jugadores y en el Alavés destaca por encima del resto su centrocampista Guzmán, un jugador con una gran visión de juego y llegada. En el Sanluqueño hay que esperar mucho de la profundidad de Salvi o del disparo de Calatayud en un partido donde los detalles decidirán.