Agentes de la Policía Nacional intervinieron a primera hora de la mañana de este pasado lunes en la barriada de Icovesa, donde ofrecieron los primeros auxilios y estabilizaron a un vecino de 81 de edad y a su esposa de 80, después de que el varón sufriera un aparatoso accidente en su domicilio, golpeándose fuertemente en la zona parietal izquierda de su cabeza.

Los agentes entrantes del turno de mañana recibían, nada más incorporarse al servicio, sobre las 06:15 horas, el aviso de la sala operativa del 091 que informaba de un posible accidente doméstico grave en un domicilio ocupado por una pareja de edad avanzada, la esposa del afectado llamó muy asustada a sus hijos relatando lo sucedido, y estos a su vez, se pusieron en contacto urgente con el 091.

Una vez que los policías se personaron en el domicilio, la mujer les guió hasta el dormitorio donde localizaron al marido semiinconsciente y tendido en el suelo, con una abundante hemorragia a raíz de una herida abierta en la zona parietal izquierda del cráneo, al parecer fruto de un fuerte golpe debido a una caída fortuita.

Los agentes requirieron de forma urgente la presencia de servicio sanitarios de urgencia del 061 mientras que aplicaban las primeras atenciones al herido, comprobando las constantes vitales del accidentado y asegurando la permeabilidad de sus vías aéreas, a la vez que aplicaban técnicas de primeros auxilios que lograron paliar el abundante sangrado.

También tuvieron que atender a la esposa del accidentado, ya que la abundante presencia de sangre, tanto en el rostro y las ropas del herido como en el piso de la alcoba, produjo en ella un desvanecimiento que requirió de una primera atención, siendo asistida por los agentes para evitar que también se golpeara cayendo al suelo, y colocada en posición de seguridad hasta la llegada de los sanitarios.

Los servicios médicos del 061 se personaron en el domicilio y atendieron a la pareja, siendo necesario el traslado del varón por las lesiones que presentaba hasta el cercano Hospital San Juan Grande, donde fue atendido satisfactoriamente, no presentando secuelas graves salvo complicaciones posteriores y ya ha sido dado de alta y ha regresado a su domicilio junto a su esposa.

Los hijos de los afectados se han puesto en contacto con la Comisaría de la Policía Nacional en Jerez para agradecer personalmente la atención y el trato dispensado a sus progenitores.

La intervención ha sido realizada por agentes pertenecientes al Grupo de Atención al Ciudadano GAC (radio patrullas), pertenecientes a la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Comisaría de la Policía Nacional en Jerez.