La Junta de Andalucía ha iniciado una ronda de contactos con las distintas organizaciones sectoriales del Marco de Jerez , al que la Consejería de Agricultura vuelve a tender la mano para trabajar conjuntamente en acuerdos y soluciones a corto plazo que le permitan salir de la profunda crisis en la que está inmerso el sector. Más que un nuevo plan estratégico, la Administración autonómica es partidaria de buscar compromisos firmes en torno a una serie de temas puntuales que colean desde hace tiempo y otros de nuevo cuño que garanticen la viabilidad futura del sector.

La Junta quiere poner orden un sector que considera estratégico y que se le ha ido de las manos por la incapacidad de las organizaciones de alcanzar acuerdos en aspectos claves para el funcionamiento de la Denominación de Origen, de ahí que fuentes autorizadas aseguraran a este medio que la Consejería de Agricultura está dispuesta a coger las riendas para ejercer la tutela efectiva del Consejo Regulador, institución que depende en última instancia de la Administración autonómica.

La Junta entiende que ha llegado el momento de regular la situación, empezando por la necesidad de separar el control de la gestión en lugar de mantener ambas funciones dentro del Consejo Regulador en organismos diferenciados, como persiguen los responsables de la institución del vino.

Tras la primera reunión que mantuvieron a finales de diciembre en Sevilla un alto cargo de la Consejería con responsables de los viticultores, las bodegas y el Consejo Regulador, la Junta ha comenzado a sentarse una a una con las distintas organizaciones sectoriales para escuchar sus propuestas. Fuentes de la Consejería explicaron que, hasta el momento, ya se han producido nuevos contactos con la patronal bodeguera (Fedejerez) y las organizaciones que agrupan a los viñistas (Asevi y Coag), estando previsto en los próximos días cerrar la primera ronda con las cooperativas.

Las mismas fuentes indicaron que la Consejería tiene especial interés en desbloquear el reglamento de la Denominación de Origen, en el que tras varios años de enfrentamiento entre las partes sigue sin haber consenso como pidió la Junta para su aprobación definitiva.

La Consejería de Agricultura aún tiene sobre su mesa el borrador de reglamento, el segundo que aprobó por mayoría el pleno del Consejo Regulador tras rechazar la Junta la primera propuesta, pero que tampoco termina de convencer a los responsables autonómicos en cuestiones como la definición de los tipos de vino que provocó un cisma entre Jerez y Sanlúcar –el fino y la manzanilla–.

Al margen del reglamento, en el que también hay aspectos jurídicos que mejorar, las organizaciones sectoriales se han mostrado interesadas en unificar criterios en torno al arranque de viñedo, la destilación de crisis y los subproductos –vino de color, alcohol y mosto concentrado– que se le añaden al jerez para completar su elaboración, pero que se elaboran fuera de la denominación de origen.

Productores y bodegas mantienen posturas próximas en la solicitud de la destilación de crisis, para la que el sector espera la publicación este mes de la norma de la Junta que permita dar salida a buena parte de los excedentes que se acumulan en las bodegas y cooperativas del Marco.

En cuanto al arranque voluntario con cargo a los fondos de la Unión Europea, la idea es planificar con tiempo las próximas solicitudes para sacar el mayor provecho posible en los dos años que restan de ejecución de esta medida, muy limitada para el Marco en la primera convocatoria.