El aeropuerto se precipita

Más allá del dato comparativo con el tren, se evidencia un hecho preocupante para el aeropuerto de la provincia. Jerez ha perdido vuelos y pasajeros en grandes cantidades en los cinco últimos años. Nada menos que medio millón. En 2008 el aeropuerto de Jerez soñaba con codearse con los grandes aeródromos españoles. Había alcanzado una cifra de 1.297.000 pasajeros. Su principal tráfico, cuando el Alvia aún no se había instalado en la Bahía, era con Barajas, donde por entonces alcanzó 525.000 pasajeros. En ese ejercicio, en cualquier caso, ya había tenido una importante caída, pues el anterior año había vendido 613.787 pasajes a la capital. Esta reducción podía ser asumible si se contaba con que otros vuelos regulares, como Barcelona o Londres, sumaban casi 250.000 billetes.

La huida de las compañías del aeropuerto jerezano, en una tendencia paulatina desde aquel último año glorioso, ha ido reduciendo la importancia del aeropuerto de Jerez en el contexto nacional. Si se miran los datos de Aena de 2008 encontramos decenas de destinos y nueve de ellos superaban los 30.000 pasajeros al año. En 2013 sólo siete destinos superan esa cifra y tres de ellos son alemanes. Entre Stuttgart, Frankfurt y Dusseldorf suman 180.000 pasajeros, casi los mismos que el pasado año viajaron o vinieron de Madrid en avión. Si incluimos el resto de aeropuertos alemanes (Hannover, Munich, Colonia) se supera ampliamente al que llegó a ser primer mercado, casi un puente aéreo. Los destinos alemanes son la aportación que, básicamente, Chiclana realiza a las estadísticas del aeropuerto de Jerez.

En estos cinco años, sin embargo, Barcelona y Londres, que ya no son vuelos regulares, han perdido pasajes a puñados y ya no son el segundo y el tercer mercado del aeropuerto como lo eran en 2008. Barcelona ha caído al quinto puesto -incluso por detrás de Palma de Mallorca, lo que tiene mucho que ver con el turismo alemán- y Londres, al sexto. En número de pasajeros haber perdido estos destinos ha supuesto una caída de más de 150.000. Si se suman a los más de 300.000 de Madrid ya nos salen las cifras.

Las campañas que en su día se anunciaron para captar nuevas compañías y los reclamos de Fitur para llegar a la provincia en avión sólo convencen a los ya concencidos, es decir, a los touroperadores alemanes. Otros países en los que se gastó esfuerzo y dinero para 'vender' la provincia, como Suecia o Rusia, no aparecen en el listado de vuelos.