DENTRO de las líneas de su ambicioso Plan Estratégico para el marco 2009-2013, la CEC decidió renovar sus herramientas de comunicación para adaptarse a un nuevo entorno caracterizado por la interactividad, la hipertextualidad y la conectividad.  Si un avance importante para la humanidad fue la llegada del hombre a la Luna, no menos lo fue que millones de personas pudieran contemplarlo desde el televisor de sus casas. Así lo afirmaba Macluhan al situar en tan emblemático hito el inicio de la Aldea Global.  Una Aldea Global en la que ahora el hombre contempla y participa. Macluhan, uno de los más prestigiosos  y también controvertido teórico de la comunicación, afirmaba que el medio es el mensaje, en el sentido de que  el contenido de dicho mensaje está condicionado por  la estructura del medio, el cual controla la escala y la forma de las acciones y asociaciones humanas. Efectivamente, según este visionario, cada nueva tecnología supone una nueva concepción de la vida, del ocio, de la sociedad, del trabajo y hasta de la política. Cada nuevo medio, nos dice Macluhan, introduce un cambio de patrón en las relaciones humanas, así lo hizo la llegada del ferrocarril a las ciudades y así lo ha continuado haciendo cada nuevo avance tecnológico. Y si Macluhan realizó una clara división entre los medios calientes y fríos, según la participación del receptor-baja en los primeros, alta en los segundos-internet es, según esta teoría el medio frío por excelencia o, como dice Sempere en su magnífico libro “Macluhan en la era de Google”, el medio hiperfrío por la intensa participación que genera ya que el medio acaba siendo el usuario, quien transforma en información lo que el medio transporta. La comunicación actual ha dejado de ser unidireccional y se caracteriza por la interactividad de las personas, la hipertextualidad de los contenidos y la conectividad de las inteligencias. Ya dijo Darwin que la supervivencia depende de la capacidad de adaptación al entorno. Así lo entendieron quienes supieron ver que si seguían con la diligencia para transportar sus mercancías, no podrían sobrevivir frente a los que empezaban a usar el ferrocarril. De este modo, no podemos negar los avances que suponen las nuevas tecnologías de la comunicación al igual que debemos estar atentos a los posibles efectos perversos contrarios a sus valores que supone cualquier nuevo avance tecnológico. Esto último no puede llevarnos a su negación sino a un uso responsable y acorde a sus fines que, en este caso, sería el de una comunicación más rápida, eficaz y participativa. Debemos estar atentos para que esa rapidez no sea merma para la calidad. Conscientes de esta nueva realidad, la CEC está inmersa en un ambicioso plan de comunicación que pasa por la presencia activa en las redes sociales (@ceccadiz / www.facebook.com/ceccadiz / www.youtube.com/ceccadiz) desde las cuales mantener informados a nuestros seguidores de todas las actividades y los servicios empresariales; seguir dotando de contenidos de calidad a nuestra web www.ceccadiz.org-que ocupa según el prestigiosos ranking Alexa el segundo puesto dentro de las páginas de las organizaciones empresariales andaluzas y por encima incluso de algunas regionales; o la puesta en marcha de la multiplataforma www.canalcec.tv, el canal de tv de las empresas gaditanas, con más de 7.000 visitas en su primer año de existencia y que ha sido presentada en Madrid ante otras organizaciones empresariales por la novedad de este portal de información empresarial. Esta es sólo la punta de lanza del camino que ha empezado a recorrer nuestra organización.