Los trenes tienen una antigüedad media de 4 años

Los directivos de Renfe explicaron que los trenes de autopropulsión eléctricos que circulan por Andalucía tienen una antigüedad media de tan sólo 4 años cuando la vida útil de estos vehículos puede prolongarse hasta los 30 si es bien mantenido. “Contamos con los trenes más modernos de España, en cierto modo somos muy privilegiados”, agregaron.

Patricio Martínez expuso que el mantenimiento de los trenes “vae en función de los kilómetros. Cuando cumple el ciclo de kilómetros tiene que hacer una serie de cosas, en nuestro argot consistencia: tienes que mirar una serie de equipamientos muy concretos. Pero cuando el tren alcanza el millón de kilómetros o 600.000, dependiendo del tipo que se trate, se le hace como los aviones: una ‘R’, como le llamamos nosotros. Es una gran parada de casi un mes de duración que se hace en los talleres centrales de Valladolid, Málaga, Madrid... En este caso se hace una revisión muy profunda; se sustituyen los trenes de rodaje, motores, se pintan las unidades y también hacemos mucho hincapié en inspeccionar todos los equipos que estén relacionados con la seguridad”. A pesar de que un tren bien mantenido dura más de 30 años, Avelino Castro explicó que “no se apura, porque los clientes quieren trenes más nuevos y equipados”. Las unidades antiguas suelen venderse a otros países o acaban en el desguace.

Renfe explicó que las unidades que se vienen manteniendo desde hace un mes aproximadamente en la base de Jerez acceden a la vía 1 y antes de pasar al interior de la nave se realizan las pruebas funcionales programadas (freno -ayer se trabajaba en el equipo de una unidad- tracción…), así como la evacuación de las aguas sanitarias. Tras la realización de dichas pruebas, el tren se estaciona en el interior del macrotaller y se actúa en los elementos que sean precisos (bajos del tren, costados, techos, pantógrafo).

De forma simultánea los operarios de la base intervienen en cuidar o renovar los elementos del interiorismo y confort necesarios (iluminación, cristales, asientos, que suelen ser los equipos más dañados ). Una vez finalizadas todas las actuaciones, el tren se estaciona en la vía 2 para ser recogido por un maquinista a la mañana siguiente e incorporarlo de nuevo al servicio habitual.