Programación Guía completa del Gran Premio de Motociclismo en Jerez

Mundo

Más tiempo para lograr el cambio

  • La reforma migratoria y el éxito en política internacional, entre los principales retos del recién reelegido Obama.

Sacar al país de la crisis en la que lo encontró, lograr acuerdos con los republicanos, aprobar la reforma migratoria y un éxito en política internacional: esos son los retos principales que afrontará Obama en su segundo mandato.

Lo necesitará para consolidar hasta 2016 un legado que cambie definitivamente el país que asumió en 2008 de las manos de George W. Bush: dos guerras que minaron su imagen de potencia mundial y la mayor crisis económica desde la Gran Depresión.

La economía fue el tema principal de la campaña y lo seguirá siendo ahora, dejándole apenas tiempo para celebrar su victoria.

Obama deberá confirmar la recuperación económica que se apunta. Tras más de 40 meses con el desempleo por encima de la barrera psicológica del 8%, en septiembre y octubre se situó en el 7,8% y 7,9%, respectivamente.

El triunfo del martes le reafirma en su idea de perseguir la recuperación aumentando impuestos a las familias que ganan más de 250.000 dólares al año, dinero que podría ir a parar a sus planes de desarrollo energético, de infraestructuras y de educación.

Sin más dilación, deberá ponerse a negociar con el Congreso cómo evitar el inminente "abismo fiscal", que se traducirá en drásticos recortes y aumentos de impuestos si los dos partidos no se ponen de acuerdo sobre un nuevo Presupuesto.

Ya fuera de Iraq y saliendo de Afganistán, el presidente puede perseguir la agenda que quiere si la visible fatiga que genera la Casa Blanca, la división del país y la mayoría republicana de la Cámara de Representantes, que bloqueó sus iniciativas legislativas los dos últimos años, no lo impiden.

El presidente manifestó su esperanza de que sus rivales se ablanden ante la segunda derrota seguida y el hecho de no tener ya que vencerlo en 2016.

Más allá aparece la reforma migratoria, promesa incumplida en su primer mandato y renovada en su discurso de la victoria. De cumplirla, podría suponer la legalización de millones de inmigrantes sin papeles. Obama ya dejó claro que es consciente de que está en deuda con las minorías, especialmente con los latinos, que tanto en 2008 como ahora le dieron su apoyo.

En política internacional, la tensión por el programa nuclear de Irán será prioritaria. De momento, optó por la vía de las sanciones económicas pese a las presiones de Israel de ir más allá.

En 2014 cerrará la guerra en Afganistán y desde varios sectores se le pide más implicación en Siria. No se descarta que trate de impulsar más concienzudamente un acercamiento entre Israel y los palestinos, si bien hasta ahora sus intentos han fracasado. Todo ello seguramente con una nueva secretaria de Estado, pues Hillary Clinton anunció que quiere dejar el puesto.

A diferencia del primer mandato, Obama ya no tendrá que preocuparse de la reelección, lo que puede darle más libertad.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios