La plantilla de la UTE Daibus, la empresa concesionaria de autobuses urbanos, ha supeditado el inicio de la huelga que tienen convocada a partir de hoy miércoles a una reunión prevista con la empresa y el Ayuntamiento portuense en el Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía (Sercla). De no alcanzarse un acuerdo se iniciará inmediatamente la huelga.

Será una nueva reunión tras la celebrada el pasado viernes, a la que no acudió representación municipal. Matías Gautier, presidente del comité de empresa, lamentó este hecho, porque "aunque con quien deben negociar los trabajadores es con la empresa, el Ayuntamiento tiene que intervenir en muchas cosas". Las razones de la huelga, según explicó son la negativa de la empresa a sentarse a negociar con los trabajadores un nuevo convenio propio para el presente año, y el cobro de un "plus de mejora" de 120 euros que mensualmente recibían desde 2009, y que ya no cobran desde enero, a raíz de un compromiso alcanzado con la anterior compañía del servicio. Los trabajadores esperan que se pueda llegar a una solución, aunque Gautier adelantó que tienen "malas perspectivas".

La plantilla celebró ayer una asamblea que sirvió para "fortalecer" su decisión a ir a la huelga si no se alcanza ningún acuerdo hoy. "Los empleados se sienten utilizados por la empresa, que estaría valiéndose de ellos como instrumento de presión contra el Ayuntamiento, que a su vez le adeuda dinero a la compañía", explicó. Gautier criticó además a UTE Daibus por "haberse ido de puente" y no haber "aprovechado" la jornada de este lunes, que consideraba "fundamental", para desactivar la posible convocatoria de huelga.

Por otro lado, el presidente del comité de empresa ha señalado que, aunque considera "lógico" el porcentaje de servicios mínimos que ha fijado la Junta de Andalucía, que consistirán en un autobús por cada una de las líneas ordinarias existentes, con el horario de comienzo y finalización de las jornadas habituales y la dotación correspondiente, tiene "pánico" por los posibles "altercados" que podrían producirse con los usuarios de llegarse a producirse la huelga.

El Ayuntamiento ya emitió un comunicado acusando a los trabajadores de convocar una huelga con trasfondo "político".