Garantizar la igualdad de oportunidades entre los estudiantes iberoamericanos ha dejado de ser una utopía. El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, inauguró ayer en Río de Janeiro el III Encuentro Internacional de Rectores Universia, donde nació con fuerza la idea de impulsar un programa marco de movilidad académica que contribuya a reforzar la identidad iberoamericana.

Rebeca Gryspan, la secretaria general de Iberoamérica, subrayó que este proyecto dará una oportunidad a muchos jóvenes para que se puedan beneficiar del conocimiento y la realidad de otras ciudades. Ya tiene trazada la hoja de ruta y su objetivo es contar con 25.000 becas, dotadas con entre 3.000 y 4.000 dólares por alumno y semestre, en el curso 2015/2016 para llegar a las 200.000 en 2020. "Erasmus es lo que más ayudó a la construcción de la identidad europea, y el programa iberoamericano tiene que aspirar a ser igual y a garantizar la igualdad de oportunidades".

Botín recordó, ante más de 1.100 rectores de 33 países diferentes que se dieron cita en Riocentro, el mayor centro de convenciones de América Latina, que el Santander ya puso en marcha un ambicioso programa de becas de movilidad iberoamericana, que en sólo cuatro años ya ha beneficiado a 10.000 estudiantes de grado pertenecientes a 378 universidades de la región que han cursado, al menos, un cuatrimestre en otra universidad de un país iberoamericano distinto del suyo. "Esto no habría sido posible sin la intensa colaboración de las universidades a través del reconocimiento de estudios y con criterios de reciprocidad", comentó, para añadir: "Unos 2.000 jóvenes profesores e investigadores, menores de 35 años, también han realizado estancias en otras universidades en estos cuatro años".

La intención de Gryspan es trasladar esta vieja aspiración de la región a la próxima Cumbre Iberoamericana, que se celebrará en diciembre en Veracruz, para que sirva de lanzadera del proyecto. Su intención no es otra que recabar los apoyos necesarios para poder convencer a los jefes de Estado y de Gobierno e implicar en el programa de las erasmus iberoamericanas a todos los actores posibles, desde los rectores a los jefes de Estado y de Gobierno de la región pasando por el sector privado y la sociedad civil. "La educación es nuestro principal instrumento para procurar una sociedad más próspera y, por suerte, los argumentos fantasmas que se oponían a que se financiara ya caminan derrotados por la región", declaró.

A continuación, la secretaria general iberoamericana, tras reconocer el apoyo del Santander con un programa de becas "ejemplar", destacó la experiencia europea con las becas Erasmus para asegurar que "con el esfuerzo de todos podremos construir este programa, y el desafío ha de ser llegar a los 200.000 jóvenes becados en 2020". A todos los presentes les propuso, en este perfecto marco, una "alianza de Gobiernos, universidades, empresas y sociedad civil que garantice la movilidad". "Puede parecer utópico -dijo- pero tenemos que caminar".

El presidente del Santander manifestó que el encuentro es un acontecimiento único en la historia contemporánea de la universidad "porque nunca antes se dio una reunión tan relevante de máximos representantes de diversos países", pero sobre todo porque culmina un intenso proceso de reflexión y debate previo en el que participaron 100.000 estudiantes, rectores y profesores de todo el mundo".