La importancia de la estrategia

Para muchos, fue Benito Floro con aquel mítico Albacete de la década de los noventa quien despertó en el fútbol español la necesidad de fomentar la estrategia. Fue quizás el precursor del uso de la pizarra pues no solamente aprovechaba las acciones a balón parado, sino que incluso llegó a reivindicar en charlas y coloquios aquello que en su momento sonaba a broma ('La importancia del saque de banda en el fútbol de ataque'), pero que a día de hoy se ha convertido en una nota constante en todos los equipos profesionales.

Desde entonces, y más si cabe en una categoría donde las diferencias entre los equipos son mínimas, la estrategia se ha convertido en un factor fundamental, pues bien trabajada puede decidir un partido.

Este hecho lo ha contemplado desde el inicio de Liga Javi López, un técnico al que se le podrán reprochar mil cosas pero que después de muchos años ha conseguido dotar al Xerez de un laboratorio propio y que en lo que llevamos de competición ha dado muchos puntos a los suyos.

Y es que de la habitual jugada de estrategia implantada por Lucas Alcaraz y posteriormente utilizada por Esteban, a través de Antonio Méndez (encargado de la estrategia), en la que Moreno siempre solía peinar en el primer palo para que sus compañeros entraran en el segundo, se ha pasado a un ejercicio mucho más elaborado pues si en algo ha incidido el preparador catalán desde que está en el Xerez es en trabajar esta faceta, ya sea en acciones de córners o en faltas laterales.

A falta de una jornada para que finalice la competición, el Deportivo ha convertido doce goles en jugadas de este tipo, mayoritariamente en faltas y saques de esquina, toda vez que las acciones de tiro libre son otro cantar, ya que el Xerez no hace un gol de falta directa desde hace dos temporadas cuando Momo, de gran zurdazo, le coló el balón al tinerfeñista Sergio Aragoneses en Chapín por toda la escuadra.

El último ejemplo de este buen balance lo vimos el pasado domingo ante el Celta cuando los xerecistas anotaron sus dos goles en acciones de estrategia. Dos córners, ambos botados por Óscar Díaz, sirvieron a los azulinos para sumar tres nuevos puntos.

Un ejecutor No es posible una estrategia perfecta sin un especialista, sin un lanzador cualificado que ponga el balón como lo quieren los rematadores. Un buen centro es el que sale de la bota como una pelota tensa, fuerte, con la parábola abriéndose o cerrándose para burlar a defensas y porteros. En este aspecto, la mayoría de los goles xerecistas han salido de las botas de dos futbolistas, Capi y Pablo Redondo, principales tiradores esta temporada. El camero, igual que el valenciano, tiene un excelente golpeo de balón, y un toque sutil, dos cualidades que le han dado muchas alegrías al equipo. En concreto, Redondo ha asistido en cinco ocasiones, las mismas que ha asistido el ex bético.

Evidentemente, el éxito de la estrategia no sólo depende de un buen lanzador, sino que también es necesario contar con una nómina de cabeceadores importantes. López ha tenido siempre en cuenta el potencial de su plantilla en este aspecto, pues contar con jugadores como Moreno (autor de tres goles de estrategia), Lombán (siempre activo pero al que le ha faltado el gol), Rafa Barber, José Mari o Mario Bermejo es una garantía. De cualquier forma, los azulinos han incrementado su capacidad aérea a partir de la segunda vuelta, y tras la llegada en el mercado invernal de Gioda.

Los casi dos metros del argentino han supuesto una ventaja para las acciones a balón parado y su participación ha sido fundamental en esta faceta. Tanto es así que de los seis goles de estrategia marcados por el Xerez en la segunda vuelta, en cinco ha participado el de Independiente, unas veces como puente y otras, como goleador.

Quizás, el aspecto realizador no se corresponde con su aportación al equipo, en parte por la mala fortuna que ha tenido pues unas veces los palos y otras brillantes actuaciones de los porteros han evitado que el central obtenga un mayor número de goles.

otras suertes También a balón parado aunque ya desde una perspectiva diferente, desde el punto de penalti, han llegado tres goles. No ha sido ésta una temporada pródiga en penaltis señalados a favor de los xerecistas y de los pocos pitados a favor solamente han podido convertir tres, en la jornada 12 ante el Betis (Óscar Díaz); en la jornada 16 ante Las Palmas (Pablo Redondo) y en la jornada 34 ante el Granada (Óscar Díaz).