Un incendio en un piso de un bloque de la calle Pajarete provocó una gran alarma al mediodía de ayer hasta que los bomberos y las fuerzas de seguridad localizaron la vivienda afectada, que estaba vacía en esos momentos. El fuego causó daños en el salón de la casa, un segundo piso, antes de que pudiera ser controlado con el empleo de unos 100 litros de agua. El propietario del piso y también del popular bar Cristina, Luis, compareció minutos después del suceso, ya que estaba trabajando, y preso de los nervios manifestó que "lo malo ha sido que tenía una bombona de butano muy cerca de donde comenzó el fuego. Si llega a estallar... Lo siento mucho por los vecinos", aunque estos le apoyaron en todo momento y le ayudaron a limpiar la casa. Varias personas se autoevacuaron y salieron a la calle al sentir la humareda, aunque muy pocos sabían de la existencia de la bombona.

Los bomberos hicieron un gran despliegue ante el aviso de que era un incendio en una vivienda habitada. Mientras una dotación trabajaba desde Pajarete otro equipo se introdujo por el patio principal del edificio, que da también a la calle Zaragoza, junto a policías locales y nacionales, que recabaron los datos del afectado y de la vivienda.

Los mismos vecinos y las fuerzas de seguridad sospechan que un irresponsable pudo tirar la colilla de un cigarro encendida contra la ventana, resbalar el resto de este pitillo sobre algún material inflamable y provocar el incidente, ya que el afectado no fuma, aunque los bomberos señalaron oficialmente que se desconocen las causas del siniestro. El hombre no había podido valorar qué daños había sufrido su casa y esperaba que acudieran los peritos de la aseguradora.