El portavoz de la plataforma 'Porvera Viva', Juan Sevilla, salió ayer al paso de las declaraciones de la secretaria de organización del PSOE, Charo Cano, en las que afirmaba que dicha plataforma "se ha quedado muy solita" en su oposición a los cambios que ha introducido el Plan de Movilidad en la calle Porvera. Sevilla señaló que "una cosa es estar solo y otra ser independiente y nosotros hemos sido independientes desde el principio. Fueron las asociaciones de comerciantes las que vinieron a darnos su apoyo y cuando lo han hecho, se han ido". Para rebatir la opinión del PSOE, el portavoz de la plataforma indicó que la misma está formada por 40 comercios, los que hay en Porvera, sin contar bancos y oficinas, en los que trabajan 108 personas. "En estos días se han producido ya seis despidos y dos trabajadores han pasado a tener media jornada. Además, llevamos ya recogidas más de 2.500 firmas. Si eso les parece estar solos".

Desde la plataforma muestran su confianza en que la alcaldesa Pilar Sánchez les reciba en unos días, una información que les ha llegado de forma extraoficial. Cuando se produzca esa reunión le presentarán las propuestas que lleva la plataforma para esa calle. Hay que recordar que en un primer momento, la pretensión de estos comerciantes era que la calle Porvera volviese a su estado anterior, debido a los perjuicios que, en su opinión, les está causando el carril-bus y la llamada aleta de tiburón.

Sevilla anunció que se van a producir otros cuatro despidos antes de que acabe el mes y que ya hay dos negocios que están pensando en trasladarse a otra zona de la ciudad.

Hay que recordar que las asociaciones de comerciantes así como los sindicatos se desmarcaron de las movilizaciones que estaban previstas por la plataforma y que dependerán en gran parte de la reunión con la alcaldesa.

De otro lado y tras la manifestación que el martes convocaron los vecinos de Federico Mayo por los cambios en las líneas de autobuses, el secretario local del PSA, Santiago Casal, instó ayer al delegado de Movilidad a que "acceda a las peticiones que estos vecinos le plantean, ya que las nuevas líneas de autobuses les han perjudicado no sólo a ellos, sino a toda la zona Sur". Casal dice que "el servicio público que ahora se presta es mucho peor porque no han primado la comodidad y el beneficio para los ciudadanos, sino otros intereses". Advierte que el gobierno local no puede seguir ignorando esta situación "adoptando una actitud conservadora al imponer sus decisiones cuando los vecinos ya le han demostrado que no están de acuerdo".