La alcaldesa de Jerez, Pilar Sánchez, dejó claro ayer, tras el acto de la Pisa de la Uva celebrado ante la Catedral de Jerez, que el Gobierno local no permitirá que Vicasa ejecute sin más su anuncio de cerrar la fábrica de botellas, máxime si tiene en cuenta que recientemente tanto la compañía como el Ayuntamiento rubricaron un convenio mediante el cual se facilitaba el cambio de sede de la compañía siempre y cuando se garantizara la continuidad de la actividad industrial en la ciudad.

"Se ha tratado -apuntó ayer Pilar Sánchez- de un anuncio realizado desde la más absoluta falta de responsabilidad. Es una medida adoptada por sorpresa y de forma unilateral. Ni que decir tiene que esta semana, probablemente el próximo miércoles, pediré explicaciones a Vicasa sobre este anuncio".

La primera edil quiso destacar ayer en todo momento que desde el Ayuntamiento y como objetivo prioritario "vamos a pelear por evitar el cierre de la empresa. Que nadie quiera ver más allá de lo que hay realmente. La intención del Ayuntamiento fue incentivar a la compañía para que se quedara en Jerez, para que cambiara de sede y mantuviera la actividad industrial. Si Vicasa no mantiene la actividad industrial no hay convenio que valga", destacó la primera edil. O lo que es lo mismo, si Vicasa se va de Jerez los terrenos en los que actualmente se asienta su factoría dejarán de ser urbanizables.

Pilar Sánchez aseguró que los responsables de Vicasa "deberán dar muchas explicaciones a la ciudadanía" tras el anuncio de su marcha, máxime "si se tiene en cuenta que han recibido numerosas ayudas con dinero público procedentes de la Junta de Andalucía".

Igualmente, la alcaldesa de Jerez, Pilar Sánchez, anunció ayer la construcción de un frente común "para el mantenimiento de la actividad industrial", un frente "en el que ningún partido vaya a sacar rendimientos políticos. Y es que si en cualquier momento se produce una fractura en dicho frente común será la propia Vicasa la que la aprovechará en su propio beneficio". Es por ello que Sánchez instó a todos los partidos y a todos los sectores sociales y económicos de la ciudad "a que trabajemos todos a una para evitar este cierre".

De otro lado, Sánchez quiso destacar que "no hay razones de peso que justifiquen el cierre de la planta de Jerez", una medida empresarial que no va en consonancia con los datos económicos que se tienen constancia de la compañía.