No hay motivo de momento para la alarma. La incidencia de las alergias al polen propias de este tiempo se mantienen aún en la zona en un nivel moderado, según afirma la alergóloga del hospital Carmen Millán. La Sociedad Española de Alergología estima que las enfermedades alérgicas en España afectan a un 30% de la población y entre los alérgicos, alrededor de la mitad lo son a pólenes de plantas y de éstos, la mayoría a gramíneas. En la zona afectan especialmente el polen del ciprés, que ha proliferado mucho por su utilización en los unifamiliares como seto, de plátano de sombra y también el polen de olivo y de gramíneas. No obstante, el hecho de que aún los médicos no estén viendo una sintomatología muy acusada en sus consultas, no garantiza que la situación no empeore. "Ahora estamos empezando y se está viendo alguna patología pero no muy llamativa. No obstante, seguro que en mayo y junio habrá más incidencia por las concentraciones de polen de olivo y gramíneas", asegura la doctora Millán.

Aún así es cierto que las previsiones de la Sociedad Española de Alergología apuntan a un nivel moderado de incidencia, debido a que se esperan temperaturas con valores superiores a los habituales y un descenso de las precipitaciones con respecto a otros años. Hay que tener en cuenta que existe una relación directa entre las precipitaciones del otoño y el invierno y los recuentos de polen durante la primavera. En nuestro país las especies que más síntomas alérgicos producen en orden decreciente son gramíneas, olivo, ciprés, salsola, plátano de sombra y parietaria.

Los pacientes que están debidamente vacunados no precisan de tanta medicación"

La inmunoterapia con extractos alergénicos, conocida como la 'vacuna de la alergia', se ha convertido en un excelente recurso para los alérgicos y cada vez con mejores resultados, según indica la doctora Millán. "Los pacientes debidamente vacunados no necesitan habitualmente de tanta medicación, porque la vacuna va modificando el curso natural de la enfermedad de forma que los síntomas son muy leves". La vacuna es, según estos especialistas, lo único que impide la evolución de la enfermedad hacia el asma, una patología ya de cierta gravedad.

De cualquier manera, tal como explica Millán, existe también un amplio arsenal terapéutico para tratar la sintomatología caso de los antihistamínicos, que cada vez tienen también menos efectos secundarios.

Hay que recordar que la alergia suele llegar acompañada de una serie de incómodos síntomas. Es frecuente que se detecte picor en la nariz o en los ojos, moqueo con congestión nasal, tos en golpes o tras haber realizado un esfuerzo, pitos al respirar, cansancio tras llevar a cabo ejercicios moderados, ahogo, enrojecimiento, lagrimeo o molestias a la luz. El Servicio Andaluz de Salud (SAS) aconseja que si la persona detecta uno o más de estos síntomas acuda a su centro de salud y lo comente con su médico de familia o pediatra. Recomienda además que si los síntomas se agravan y tienden a convertirse en tos recurrente, ahogo frecuente o en aumento, incremento del cansancio incluso tras mínima actividad, aumento de la frecuencia de los pitos, intensificación del moqueo o congestión o aumento de la irritabilidad ocular, se acuda a los servicios de Urgencias o del centro de salud o del hospital.

El Centro de Información al Ciudadano Salud Responde de la Consejería de Salud cuenta todas las primaveras desde 2005 con un servicio de mensajería móvil para informar sobre los niveles de polen. Estos sms se emiten con carácter provincial y ofrecen al ciudadano un conocimiento previo y actualizado sobre el índice de partículas en el aire de los distintos tipos de polen, lo que permite prevenir una crisis alérgica.