La clausura de la I Convención Empresarial de la Provincia de Cádiz contó con la presencia del presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía, Javier González de Lara, y del presidente de la Confederación de Empresarios de Cádiz, Javier Sánchez Rojas. De Lara apuntó en su intervención que los empresarios necesitan cambios en materia fiscal, laboral y jurídica.

 

El presidente de la Confederación de Empresarios Andaluces  sostuvo un discurso muy similar al de Javier  Sánchez Rojas y sostuvo que es “necesario” rebajar la presión fiscal para favorecer el consumo”. 

 

“Estamos dando los primeros pasos para recuperarnos y empezar a crecer”, dijo. Dejó bien claro “el compromiso” de los empresarios “con la sociedad porque el desarrollo empresarial es compatible con el desarrollo social y con la responsabilidad”. 

 

“Desde la patronal creemos que sin ética no hay éxito económico”, sostuvo. Igualmente solicitó a los andaluces un impulso a “una conciencia colectiva que recupere valores” como el esfuerzo y la firmeza. 

 

Por su parte, Javier Sánchez Rojas destacó en su alocución que “el objetivo (del encuentro) era intercambiar el conocimiento entre los distintos sectores”. Dicho de otro modo, “que el metal sepa dónde qué le duele al turismo o que las empresas agrarias conozcan las necesidades del comercio” y viceversa.

 

El presidente de los empresarios provinciales fue claro en su mensaje: “Todos los sectores empresariales de la provincia retratan situaciones comunes, problemas troncales de cuya solución queremos ser los motores”. Así, hizo un llamamiento a la unidad de la provincia (olvidándose de los localismos) y aprovechando un hecho innegable: “Lo privilegiado de su enclave y el potencial logístico” de la zona.

 

¿Cuáles son las demandas comunes de los empresarios? Pues según apuntó Sánchez Rojas éstas son básicamente el exceso de burocracia —“abrir una empresa es una procesión interminable de trámites sin coordinación alguna”—; la necesidad de que las leyes “sean menos pero mejores, ya que lo que no puede ser es que la legislación se convierta en una interminable retahíla de normas que provocan inseguridad y trato desigual”. Igualmente solicitó que los convenios colectivos no sean “un elemento que reste competitividad sino todo lo contrario, deben ayudarnos a sumar eficacia, productividad, rentabilidad...”.

 

Clamó el presidente de los empresarios provinciales porque se afronte una rebaja en las cotizaciones sociales para poder mantener las plantillas, así como porque se pueda “invertir más en I+D+i y en formación”. 

 

Tuvo palabras de agradecimiento para los emprendedores, que han sido capaces “de crear el año pasado 1.408 empresas en la provincia”, sobre todo por parte de empresarios menores de 35 años.  Igualmente, y con todo acierto, trasladó a los políticos un ruego extensible a toda la ciudadanía: “Estamos cansados de broncas y de disputas cansinas”. “A qué nivel —se preguntó Javier Sánchez— debemos llegar de desempleo, de cierre de empresas... para que se sienten y hagan lo que tienen que hacer: ponerse en marcha, con acuerdos rápidos sobre lo que todos sabemos que se tiene que hacer para dar un empujón a esta provincia”.