El neerlandés Max Verstappen, último campeón del mundo de Fórmula 1, intentará reforzar su liderato en Silverstone, circuito que albergó en 1950 la primera carrera de la historia de la categoría reina y que este fin de semana será sede del Gran Premio de Gran Bretaña, el décimo del Mundial. No quiere sorpresas y pretende sacarse la espinita de la pasada temporada por su accidente tras el toque de Hamilton.

Pase lo que pase, 'Mad Max' saldrá líder del Mundial. Al firmar hace dos domingos en Canadá su sexta victoria del año, conteniendo los ataques finales del español Carlos Sainz, que acabó segundo, suma 175 puntos, 46 más que su compañero mexicano Sergio Pérez, que se tuvo que retirar en Montreal, y con 49 de ventaja sobre el otro piloto de la Scuderia, el monegasco Charles Leclerc.

Entre sus 26 triunfos en la categoría reina, la joven estrella neerlandesa no cuenta ninguno en el Gran Premio de Gran Bretaña, el único, junto a Italia, siempre presente en los 72 años de existencia de la Fórmula Uno. Pero sí ganó hace dos años en Silverstone, uno de los circuitos que repitieron para reconfigurar el calendario el Mundial de la pandemia y que organizó el 'GP del 70 Aniversario', referente a la primera carrera de la historia de la F1.

Ferrari, que brilló durante la pretemporada y arrancó con muy buen pie el Mundial, le cedió hace cuatro carreras el bastón de mando a Verstappen y a su equipo, Red Bull, que lidera asimismo el Mundial de constructores, con 304 puntos, 76 más que el equipo de Sainz -quinto en la general individual, con 102- y con una ventaja de 116 sobre Mercedes. La escudería alemana, que marcó un hito histórico al ganar los ocho últimos Mundiales de constructores, no es lo que era y tuvo que conformarse como mejor botín posible en Canadá con el tercer y cuarto puesto de sus dos pilotos, Lewis Hamilton y George Russell.

El trazado

Silverstone, que durante la Segunda Guerra Mundial albergó un aeródromo de la RAF (Royal Air Force) es un circuito 'de piloto', rápido y complicado, de 5.891 metros, con 18 curvas (ocho a la izquierda), algunas de ellas, míticas, como Copse y las enlazadas de Maggotts, Becketts y Chapel. Una pista con un asfalto muy abrasivo en la que, por ese motivo, en seco se rodará con los neumáticos de la gama de compuestos más rígida, los C1 (duros, reconocible por la raya blanca), C2 (medios, raya amarilla) y C3 (blandos, roja).

Este viernes arrancarán los entrenamientos libres para la décima de las 22 carreras que conforman un Mundial que, como ya empieza a ser habitual, se cerrará el próximo 20 de noviembre en Abu Dabi.

Los ensayos se completarán el sábado, horas antes de la calificación, que ordenará la parrilla de salida de la carrera dominical, prevista a 52 vueltas para completar un recorrido de 306,2 kilómetros.

Fernando Alonso llegando al paddock en bicicleta.

Reválida para Sainz y Alonso

Carlos Sainz y su compatriota Fernando Alonso se repartieron el protagonismo hace dos fines de semana en Canadá, donde se unieron, en dos jornadas consecutivas, al festival que organizó Verstappen para presentar su candidatura a revalidar titulo.

En Montreal, el doble campeón mundial asturiano se exhibió en mojado para acabar la calificación en el segundo puesto, el mismo que ocupó el domingo el piloto madrileño, cada vez más cerca de su primera victoria y que le hizo sudar la gota gorda a un Mad Max con cuentas pendientes en este trazado.

El año pasado, le sacó de pista y acabó en la clínica del circuito un Hamilton que elevó  a ocho su propio récord histórico de victorias en el GP de Gran Bretaña. 'Sir' Lewis es el único de los pilotos en activo que mejora las dos victorias de Alonso en el mítico circuito inglés, en el que también ganó dos veces el cuádruple campeón mundial Sebastian Vettel.