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Chapín, teatro de sueños

Los xerecistas reciben por primera vez en su historia a un conjunto azulgrana que llega con sus mejores jugadores. Ziganda realizará varios cambios tras la goleada encajada en Getafe

Chapín, teatro de sueños
F. Pereira/M. Romero / Jerez

02 de diciembre 2009 - 05:02

El Fútbol Club Barcelona visita esta noche Chapín por primera vez en un encuentro histórico y lo hace como líder sólido de la Liga tras adjudicarse el clásico del pasado domingo frente al Real Madrid y con Messi como flamante balón de oro. Enfrente, tendrá a un Xerez colista y 'tocado' tras la goleada en el Alfonso Pérez. El choque estaba fijado para la jornada 15, que se debe disputar el día 20, pero se adelanta a esta noche porque el cuadro azulgrana estará disputando en Mundial de Clubes en los Emiratos Árabes.

¿Es posible hacer daño al equipo de Guardiola? Los fríos números invitan al pesimismo pero el corazón y las sensaciones deben invitar a todo lo contrario. Es posible hacer daño al Barça, pero los azulinos van a tener que derrochar sobre el campo algo más que ilusión, ganas y buenas intenciones para que una noche que los culés pueden imaginar apacible se les convierta en una jornada repleta de pesadillas.

En el fútbol, resultados extraños siempre se dan a lo largo de la temporada y el Deportivo debe creer y aferrarse a ello, a pesar de que este Barcelona se presenta tan completo y tan compacto que apenas ofrece fisuras. De hecho, no ha perdido y lo que es más grave, no da sensación de que vaya a hacerlo a corto plazo. Lleva 30 goles a favor por 4 de los azulinos y ha encajado 8, por 21 los de José Ángel Ziganda.

El encuentro, en teoría, debería servir a todos para disfrutar pero el cuadro azulino se encuentra en una situación tan complicada que eso no va a ser del todo posible. Aún así, los xerecistas están ante uno de esos partidos que nunca se olvidan y en el que se suele dar el doscientos por cien.

La mayoría se verán las caras por primera vez en su vida con los verdaderos galácticos del campeonato. Plantarles cara y tutearles como al Sevilla en Chapín hace un par de jornadas o al Real Madrid en el mismo Santiago Bernabéu durante muchos minutos es un privilegio al que no deben renunciar de antemano ni por su autoestima, ni por el bien del equipo ni por el bien de una afición que casi llenará el estadio y que acudirá encantada a seguir las evoluciones de los azulgrana pero también con su corazón azulino a muchas pulsaciones por las ganas de lograr una gesta muy muy complicada.

La motivación de cara a este encuentro seguro que no la ha tenido que trabajar demasiado Ziganda a pesar del 5-1 del pasado domingo pero sí los aspectos tácticos para intentar contrarrestar el juego de esa máquina casi perfecta. Ayer entrenó a puerta cerrada, hoy volverá a trabajar con su plantel y todo apunta a que realizará algunos cambios en relación al once que cayó goleado en Getafe.

Atrás, tendrá que hacer una modificación obligada por el partido de sanción a David Prieto, al que al final no han perdonado, y apostará por Leandro Gioda, que acompañará a Aythami en el centro de la zaga y a Francis y Casado, que ocuparán los laterales.

Le preocupan los volantes de Guardiola y en el centro del campo mantendrá seguro a Sidi Keita y a Álex Bergantiños, pero tanto en las bandas como en ataque habrá novedades.

A puerta cerrada, el técnico dispuso un partidillo en el que probó a Víctor Sánchez, quizás buscando la motivación del joven centrocampista por su condición de azulgrana, en la derecha en lugar de Orellana, al que pasó a la izquierda, en detrimento de Armenteros y utilizó a Carlos Calvo de enganche, con Mario Bermejo arriba. Una disposición nueva y sorprendente, en un nuevo intento de buscar soluciones para un bloque que no acaba de funcionar en ataque.

Mientras, Pep Guardiola tiene muchas menos preocupacioens que Ziganda porque su equipo funciona a las mil maravillas, aunque sus exigencias también son otras diametralmente opuestas a las del navarro. Quiere cerrar el año como líder y no dar concesiones al Real Madrid.

Ayer, el técnico del conjunto catalán ofreció la lista de convocados para este partido, en la que destaca la ausencia de Gerard Piqué, aquejado de algunas molestias físicas, y el regreso de Bojan Krkic, uno de los sacrificados del clásico ante el Real Madrid.

Piqué, titular ante el conjunto blanco, no entró en la lsita por decisión técnica, mientras que Sergio Busquets cumplirá un partido de sanción tras ser expulsado el pasado domingo. Tampoco Gabi Milito forma parte de la expedición, a pesar de tener ya el alta médica y a pesar de que se especulaba con su regreso tras 580 días en el 'dique seco' por culpa de sus graves lesiones en ambas rodillas.

Guardiola también incluye a los canteranos Jeffren y Jonathan dos Santos y desplazará esta misma mañana a diecinueve futbolistas.

En cuanto al once titular, todo son especulaciones, ya que el preparador azulgrana no suele dar demasiadas pistas y no ha confirmado la titularidad ni de Messi ni de Ibrahimovic.

En defensa, el preparador azulgrana tendrá que apostará por el mexicano Márquez o Chygrynkyi, con muchas más opciones para sel segundo que para el primero, como acompañante de Carles Puyol en el eje. Alves y Abidal parecen fijos en los laterales.

En la media, Touré Yayá será el pivote defensivo ante la baja de Busquets. El marfileño fue uno de los protagonistas negativos de la semana, al quejarse públicamente por su suplencia ante el Real Madrid, Xavi y Kieta tienen todos los números para acompañarle.

En ataque, Andrés Iniesta tiene un puesto reservado a la espera del estado físico de Messi, titular en el clásico, y de Ibrahimovic, que jugó en la segunda parte ante el Madrid y que además fue el autor del tanto del triunfo de los suyos nada más saltar al terreno de juego. Henry fue titular el domingo y es más que probable que repita esta noche.

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