El frío no impidió ayer que jerezanos y visitantes disfrutaran del buen ambiente festivo que se vivió en la ciudad gracias a la celebración de más de una treintena de zambombas. Los eventos organizados por las hermandades de Jerez tuvieron, como es habitual, una gran repercusión. Tal fue el éxito de las numerosas convocatorias que aparcar ayer en el centro de la ciudad desde el mediodía era casi misión imposible e, incluso, andar por algunas calles era complicado por el gran número de personas. El primer fin de semana oficial de zambombas atrajo a multitud de turistas. De hecho, el Mamelón se convirtió en parada de autobuses repletos de visitantes que no quisieron perderse un sábado muy especial para la Navidad jerezana. Un gran éxito que hizo que la hostelería y el comercio de la ciudad disfrutasen de un buena jornada que, si el tiempo acompaña, se repetirá a lo largo del cercano puente de diciembre.