De frente

Mucho Santiago

LA percepción de que las cosas van viento en popa en una hermandad se confirma cuando se traspasan sus adentros para compartir con los hermanos las interioridades en los días grandes. Basta con echar un vistazo al ambiente para darse cuenta de que las cosas ruedan. Esto viene a cuento porque el domingo, compartiendo una copa con la gente del Prendimiento, el buen ambiente, las ganas de hermandad, la ausencia de caras largas, formaban parte de un escenario que por allí ya es algo habitual pero impensable hasta hace algunas décadas. Por Santiago han sabido aparcar, o mejor dicho, gestionar con talento las 'sensibilidades', que por allí cohabitan. El Prendimiento es hoy armonía, merced a juiciosos gobernantes han sabido dotarla de seriedad y rigor pero respetando su identidad. Nadie sobra, ni payo ni gitano. Antonio Soto, Antonio Medrano, Javier Pedro, Javier Soria, Manolo Fernández y otros muchos empezaron a reescribir la vida de la hermandad, dejando estar lo que la sabiduría de Santiago da a la corporación. "Vamos las mujeres del Prendimiento, que se note que somos de aquí", fue lo que proclamó una de las que estaban tras la barra, currando por la hermandad, para marcarse una pataita por bulerías. Y es que Santiago es mucho Santiago.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios