El Ayuntamiento de Jerez de la Frontera ha valorado en 150.000 euros los daños ocasionados por la quema de 150 contenedores de basura en las dos últimas noches durante las protestas de vecinos de algunos barrios por la huelga de la recogida de residuos urbanos. 

El delegado de Seguridad del Ayuntamiento de Jerez de la Frontera, Javier Durá, ha condenado esta mañana los actos vandálicos que se han repetido esta noche y ha vuelto a insistir en la necesidad de diálogo como solución a la huelga de los trabajadores de Urbaser, la concesionaria del servicio de recogida de basuras, que cumple hoy su vigésima jornada. 

Los trabajadores, que protestan por un ERE que prevé 125 despidos y reducciones salariales, y la empresa concesionaria reanudarán las negociaciones esta tarde, a las 16.00 horas, después de que ayer no alcanzaran ningún acuerdo. 

En los incidentes de anoche, donde en algún momento llegó a haber 35 focos de fuego al mismo tiempo y en distintos puntos de la ciudad, ha sido detenido un menor, de 17 años, que fue sorprendido por la Policía Local prendiendo fuego a un contenedor y ha sido puesto ya ha disposición judicial. 

El delegado de Seguridad ha informado de que desde las cinco de la mañana camiones de una empresa pública externa, Tragsa, han vuelto, como el pasado domingo, a la ciudad para recoger la basura. 

El responsable municipal ha dicho que el Ayuntamiento ha recurrido a esta empresa con "toda legalidad" para hacer cumplir los servicios mínimos "que no se están cumpliendo" y respetando "escrupulosamente" el derecho a la huelga de los trabajadores de Urbaser. 

Estos camiones, que ya han recogido unas treinta toneladas de basura, están realizando su trabajo con normalidad y sin enfrentamientos con los trabajadores, cuyos sindicatos denunciaron en los juzgados su presencia cuando el pasado domingo recogieron la basura. 

El delegado de Seguridad ha asegurado que los camiones de Tragsa continuarán su trabajo porque la situación, con más de 3.000 toneladas acumuladas en las calles, lo requiere. 

Según han informado fuentes de los bomberos, desde el mediodía de ayer han realizado algo más de 120 salidas relacionados con la quema de contenedores, lo que hace en la última semana hayan sido ya requeridos en más de 300 ocasiones por quema de contenedores. 

Los bomberos han tenido que trabajar escoltados por la Policía, ya que algunos vecinos les arrojan todo tipo de objetos, lo que también ha ocasionado daños en los vehículos, fundamentalmente con lunas rotas.